La semana pasada era Ken Block el encargado de ‘romper Internet’ con el lanzamiento de su primer Gymkhana eléctrica, pero no son los únicos que están dispuestos a seguir mostrando toda la espectacularidad que se puede conseguir al volante de un coche. Subaru of America se ha convertido en toda una especialista en hacer llegar a los aficionados lo que más le gusta a golpe de un solo click para reproducir los muchos vídeos que tienen en su canal de YouTube.
No es para menos. El pasado mes de julio anunciaron que se lanzaba la décima edición de su popular programa Launch Control, con el cual hemos visto durante más de una década cómo ha evolucionado especialmente el mundo del off-road en Estados Unidos, en este caso atravesando las etapas del Global RallyCross Championship, el ARX, o los proyecto junto a Vermont Sportscars en el ARA, o lo que es lo mismo, el Campeonato Americano de Rallyes.
Muchas han sido las acciones publicitarias que han hecho en paralelo, y este año, además de la presencia de Travis Pastrana con el Wagon en Goodwood, Scott Speed se ha sumado a la fiesta con una grabación realizada en un escenario tan increíble como The Dragon, la que es una de las carreteras de montaña con más curvas de todo Estados Unidos, en este caso cortando los Estados de Tennessee y Carolina del Norte con una carretera de poco menos de 18 kilómetros tan serpenteante que es capaz de acoger hasta 318 curvas.
El expiloto de Fórmula 1 se enfrenta a ella tal y como le gusta a Subaru, con la versión de RallyCross del WRX y su potencia de casi 600 CV que le llevan a insinuarse a cada golpe de acelerador, prácticamente como si estuviera deslizándose un esquiador en un descenso de competición, con movimientos gráciles, agiles y espectaculares. Speed no quiere que le ‘descabalgue’ la bestia, por lo que el número que más podrás observar mientras ves la OnBoard es ese 3 que muestra el Display de la marcha engranada, el cual le permite tener potencia para atacar, pero lo suficientemente controlada para no cometer errores, aún más dolorosos cuando hablamos de una acción fuera de la competición en sí.
Precisamente, una de las cosas que más se echan en falta dentro del ARA es la presencia prácticamente inexistente de las pruebas de asfalto, por no decir completamente nula. Algo que queda demostrado que no es por falta de lugares en los que hacerlo. Los ha habido, como el ya extinto Empire State Rally, pero nunca ha sido una superficie en alza, seguramente por toda la logística y permisos que supone cerrar carreteras para este tipo de eventos deportivos.
