Había sido Toyota la primera en tener un susto, con el accidente de Elfyn Evans hace unos días que alteró el programa de test del equipo liderado por Jari-Matti Latvala y que atrasó aún más la primera toma de contacto de Sébastien Ogier con el Yaris GR Rally1, pero ha sido hoy Thierry Neuville el que se ha encontrado con el primer gran percance de la nueva era reglamentaria del Campeonato del Mundo de Rallyes.
El piloto belga se encontraba realizando un test sobre asfalto en la zona sur de Francia cuando a sufrido una fuerte salida de carretera, terminando el i20 N Rally1 en un riachuelo tras haber caído por un terraplén. La unidad de pruebas empleada mostraba grandes daños, tanto en el techo tras el pilar B, como en el frontal, donde el capó había resultado arrancado por los impactos.
En esas primeras informaciones oficiales dadas por el equipo Hyundai Motorsport GmbH se confirmaba que tanto Neuville, como su copiloto, Martijn Wydaeghe, habían sido trasladados a un Hospital en Montpellier. “Thierry y Martijn se salieron de la carretera mientras probaban el i20 N Rally1 hoy. La tripulación está a salvo y los paramédicos llegaron al lugar para tratar la lesión en el hombro de Martijn. La tripulación está de camino al hospital para una evaluación adicional«.
Cuando nos acercábamos a la media noche, el propio equipo comunicaba que Neuville había sido ya dado de alta, mientras que Wydaeghe tenía una lesión en la clavícula izquierda de la que tendría que ser operado a su regreso a Bélgica. Sin embargo, este pequeño comentario sería posteriormente eliminado para decir en este caso que tanto piloto como copiloto ya habían salido de dicho Hospital en el que se les había sometido a las pertinentes pruebas.
Evidentemente lo principal es que ambos hayan resultado sin lesiones de gravedad, sin embargo, mirándolo desde el lado deportivo, esta situación llega sin lugar a dudas en el peor momento, en plena transición de los World Rally Cars a los Rally1 y seguramente con el equipo trabajando al máximo en la sede de Alzenau para preparar distintas unidades para el inicio de la competición el próximo mes de enero en Monte-Carlo.
Por lo tanto, será de gran importancia el conocer el grado de afectación en elementos clave como el chasis tubular que este año estrenan los coches, como especialmente en la parte híbrida suministrada por Compact Dynamics. Si bien la jaula de seguridad diseñada por la FIA para estos nuevos coches parece haber cumplido con las premisas para las que fue ideada, entre ellas para evitar el hundimiento en la zona de los ocupantes, habrá que determinar hasta qué punto es ‘recuperable’ esta unidad de test. Mientras tanto, y a la espera de conocer más detalles sobre Wydaeghe, evidentemente una lesión de hombro o de clavícula puede conllevar a varios meses de baja como ya vimos con Sébastien Loeb en 2006. Especialmente si tenemos en cuenta que el Hans y los cinturones suelen reposar sobre dichas zonas y que por tanto suelen ser zonas muy castigadas por las deceleraciones.
— eWRC-results (@eWRCresults) December 4, 2021
