Seguirán explotándolo hasta que la FIA decida recortar las salidas. Con la actual reglamentación de test, los equipos tan solo disponen de 42 días jornadas para poner a punto las monturas y para encontrar los reglajes más adecuados para cada rally. En el caso de Hyundai Mototsport, la estrategia de contar con cuatro pilotos corre en su contra por ejemplo frente a Citroën Racing, con solo dos hombres que pueden realizar hasta dos jornadas previas antes de cada cita. Esto ha perjudicado no solo a Thierry Neuville, jefe de filas de la estructura dirigida por Andrea Adamo, sino que también ha repercutido en la adaptación del recién llegado, Sébastien Loeb.
El alsaciano, que competirá dentro de apenas dos semanas en el Rally de Chile, aprovechará a que el resto del equipo compite en Cerdeña para desplazarse a los Vosgos y competir en una de las citas del nacional francés, en este caso no solo con vistas a mejorar las sensaciones al volante del coche, sino también para acelerar la mejora del Hyundai i20 WRC Coupé sobre el asfalto, tratando de reducir esa sensación de subviraje constante que han padecido todos los pilotos de Hyundai Motorsport.
Sin embargo, el caso de Loeb no será único. Thierry Neuville confirmaba esta misma semana que estará presente a finales del mes de junio en el Ypres Rallye, prueba en la que venció el año pasado al volante del Hyundai i20 R5 y de la que es responsable precisamente uno de los directivos de la estructura con sede en Alzenau, Alain Penasse. Después de haber estado en varias ocasiones con el modelo carreras-cliente, el belga estará en la prueba de casa con el World Rally Car, encuadrado en este caso dentro de la sección Masters que no les permitirá luchar por la victoria absoluta de una prueba que vuelve a estar encuadrada dentro del Campeonato Británico de Rallyes y del Nacional de Bélgica.
Regresar al Ypres Rally al volante del R5, como el año pasado, no habría aportado nada nuevo a los fanáticos. Ganamos la carrera el año pasado, ¿qué más podríamos hacer? Además, realmente queríamos estar presentes en Ypres, porque es muy agradable conducir en nuestro país frente a nuestros aficionados. El año pasado, Nicolas y yo ya nos habíamos preguntado cómo sería tener un WRC actual en el recorrido de Ypres, compuesto por cunetas profundas y secciones muy rápidas. Puede que tengamos un sentimiento de falta de rivales, ya que no estamos compitiendo con los otros R5, pero podremos entretener a más fanáticos. Para mí, está claro que esta salida a Ypres será beneficioso e instructivo para mí con el WRC. Aseguraremos un ritmo constante, pero sin asumir riesgos innecesarios. ¡Será genial para los seguidores!
Por delante 143 kilómetros de tramos competitivos separados en 12 especiales que servirán para seguir recabando datos y buscar soluciones efectivas para los problemas de competitividad sobre asfalto, a la espera en este caso de competir en el Rallye de Alemania en el mes de agosto. ¿Hasta cuándo permitirá la FIA una situación de este tipo? Seguramente no tardaremos en tener noticias por parte del Consejo Mundial del Motor. Recordemos que en Estonia también volveremos a tener representación de equipos oficiales, por lo que no es descartable que otros equipos puedan optar por el mismo recurso para poner a prueba por ejemplo las evoluciones de sus coches sin repercutir en los días de test que tienen disponibles.