En una reciente entrevista concedida a la publicación Auto Motor und Sport, Toto Wolff, jefe de la escudería Mercedes, indicó que durante la temporada de 2019 los ingenieros del equipo advirtieron que la unidad de potencia Ferrari generaba aproximadamente unos 68 caballos más que la de Mercedes, motivo por el cual se ejecutó un plan conjunto entre las sedes de Brixworth y Brackley para optimizar la mecánica del W10, así que cuando la FIA intensificó la supervisión de los motores, y Ferrari perdió su ventaja, el conjunto Mercedes evolucionó hasta otro nivel.
Wolff reveló que a partir del comportamiento del Ferrari SF90 tanto en Spa Francorchamps como en Monza, circuitos de alta potencia y baja carga aerodinámica, donde el monoplaza italiano exhibió una impresionante aceleración en las rectas, se puso en práctica un plan de reacción inmediata, se tuvo que asumir que el desempeño del motor Ferrari representaba un desafío, al cual le hicieron frente hasta lograr que la unidad de potencia Mercedes alcanzará un pico de rendimiento más alto. El resultado es lo que se observa en esta temporada, mientras Ferrari presenta una evidente debilidad en su motor, Mercedes tiene el conjunto mecánico más fuerte de la parrilla.
Hasta ahora Wolff no tiene idea de cuál fue el acuerdo al que llegó la FIA con Ferrari, ni tampoco los detalles del misterio que rodeo al motor italiano del año pasado. Nada se ha revelado al respecto, pero es evidente que ahora los italianos no exhiben la misma potencia de antaño e inclusive el SF1000 suele ser el monoplaza más lento en las mediciones de velocidad tope y hasta en carrera le cuesta aproximarse a sus rivales en las rectas. En Mercedes no están seguros de lo que ocurrió entre Ferrari y la FIA, de lo que sí están seguros es que lograron extraer más caballos de su motor de combustión interna que es el área proclive al desarrollo puesto que las demás, como el sistema híbrido, constituyen zonas restringidas por el reglamento.
En palabras de Toto Wolff:
El año pasado, observamos más de 50 kilovatios de diferencia [68 caballos de potencia] y de inmediato nos trazamos la tarea de revertir esa ventaja. Ferrari nos desafió en el lado del motor y tomamos nuevas direcciones para encontrar un mayor rendimiento. Le dimos la vuelta a cada elemento que pudimos encontrar, ahora tenemos un coche más fuerte.
Vía | Auto Motor und Sport