Según la publicación Racer, desde la sede principal de Toyota en Japón se estaría meditando retornar a la IndyCar a través de una de sus filiales para así concederle mayor relevancia en los Estados Unidos. Actualmente Toyota tiene presencia en la NASCAR y a nivel comercial es el fabricante con mayor volumen de ventas, razón por la cual se cree que los ejecutivos de la compañía estarían planteando introducir los motores V6 biturbo híbridos de 2.4 litros bajo el nombre de Lexus, en vista del éxito alcanzado por el RC F GT3 en la IMSA.
La estrategia comercial sería básicamente la misma que aplica Honda con Acura en el Campeonato IMSA Weathertech Sportscar, en este caso el lote de motores sería preparado por Toyota Racing Development y la asistencia correría por cuenta de Lexus Racing y sus socios. TRD recientemente contrató a Tom German, ex director técnico del equipo Rahal Letterman Lanigan Racing, quien en teoría debe hacerse cargo del programa. Tentativamente este regreso de Toyota como proveedor estaría programado para efectuarse a partir de 2024.
Se indica además que este nuevo motor también podría introducirse en un nuevo ciclo de la Super Fórmula Japonesa, tomando en cuenta que tanto Honda como Toyota, únicos proveedores del campeonato, estarían también involucrados en la fabricación y desarrollo del propulsor IndyCar. Por todas partes, según expone la publicación, se cree que Toyota va a desembarcar en la categoría norteamericana de monoplazas y es muy probable que su equipo insignia sea Vasser Sullivan, movimiento obvio tomando en cuenta la relación que existe entre tal equipo y Lexus en la IMSA donde han brillado en la clase GTD.
Tanto Honda como Chevrolet darían la bienvenida a un tercer proveedor, inclusive representantes de cada fabricante lo han manifestado públicamente, puesto que cada uno de ellos asiste a 18 coches, lo que se traduce en una gran inversión no solamente en términos financieros sino también de recursos humanos. Si Toyota regresa, lo más probable es que la parrilla de la IndyCar pueda llegar a 40 monoplazas en las 500 Millas de Indianápolis, cifra que está buscando la organización, ahora en manos de Roger Penske.
También estaría la posibilidad, aunque algo remota, de que, más allá de Lexus, Toyota se incline por promocionar a GR (Gazoo Racing), su departamento de preparación extrema para coches comerciales.
Vía | Racer