Hace ya algún tiempo que McLaren está atenta a los movimientos que se producen en el Mundial de Resistencia y tal vez el “Back to basics” del que se lleva rumoreando desde el año pasado pueda influenciar positivamente a una posible entrada de los de Woking en la disciplina. Recordemos que uno de los puntos que está tratando la FIA y el ACO contempla la posibilidad de que la clase reina del WEC pueda tener más similitudes en cuanto a tecnología e imagen con la nueva generación de hiperdeportivos que están creando los principales fabricantes de automóviles de altas prestaciones.
Por el momento, McLaren se encuentra trabajando en un plan para el último producto que han presentado. El McLaren Senna es por el momento uno de sus coches más extremos de producción, por lo que interesa a los británicos encontrar un campeonato y un reglamento al que se pueda ajustar este superdeportivo que, entre otras chucherías, cuenta con aerodinámica activa y suspensión dinámica, dos elementos que no acostumbran a verse de forma habitual en competición en la actualidad.
Mike Flewitt, director ejecutivo de McLaren Automotive, reconocía en una entrevista reciente al medio Autocar que se está trabajando para llevar al vehículo bautizado con el apellido del icónico piloto brasileño a la competición, aprovechando que la tirada del mismo se ha elevado hasta las 500 unidades y podría por tanto cumplir con los estándares de homologación que suele exigir la FIA. Son puras especulaciones, sin embargo, la fecha de 2020 coincidiría exactamente con el 25º aniversario de la victoria del McLaren F1 GTR en las 24 Horas de Le Mans.
El otro director ejecutivo de McLaren, Zak Brown parece estar en el mismo camino que su compañero de formación. Según Brown en unas declaraciones concedidas a SportsCar365, la plataforma DPi sería la base perfecta para crear un prototipo global que pudiera competir en ambos lados del charco tal y como ya sucede con los GTE. Es por tanto una suerte de evolución de los actuales reglamentos DPi lo que está discusiones entre ACO, FIA y las distintas marcas (entre ellas la propia McLaren) con el fin de encontrar una normativa técnica que pueda satisfacer a todos y que por tanto permita competir con el mismo coche en dos campeonatos. Algo que recuerde a los extintos GTP de los que llevamos hablando ya hace unos meses.
A pesar de que son muchos los que están interesados en poder ejecutar dos programas paralelos en IMSA y WEC, entre ellos la propia Toyota que podría seguir compitiendo en el Mundial, mientras que Lexus podría adoptar un papel importante en el WeatherTech SportsCar Championship, siguen existiendo numerosos elementos de fricción. Uno de ellos es la propia tecnología híbrida que actualmente protagoniza la normativa LMP1 y que el ACO se comprometió en mantener en su campeonato… mucho menos pensar en aglutinar la diversidad de configuraciones de los hiperdeportivos bajo un mismo reglamento.
Vía | Autocar y Sportscar365