Con la llegada del nuevo año, Stefano Domenicali ha heredado el bastón de mando de la Fórmula 1 de manos de Chase Carey. El nuevo director ejecutivo de la categoría ha empezado a definir la que es la estrategia de futuro de dicha competición y con ella, algunos cambios en la línea a seguir desde que Liberty Media apareciera como responsable de los derechos comerciales del Gran Circo.
A punto de comenzar la temporada más larga de su historia, con hasta 23 Grandes Premios que se desarrollarán entre los meses de marzo y de diciembre, con permiso de la pandemia, Domenicali. Quizás lo más preocupante de las declaraciones del italiano a Sky Sports, es que deja entrever que el aumento claro de este número de pruebas se debe principalmente a que se está optando por una filosofía de que ‘a falta de calidad, buena es cantidad’.
23 carreras es un número muy importante de carreras, sin duda. En términos de cantidad, en términos de atención, en términos de dedicación de la gente. Podría haber dos posturas al respecto, alguien puede decir que hay demasiadas, otras que eso no es un problema. Yo diría que esta ecuación se resolverá por sí sola por el hecho de que, si somos capaces de entregar un producto increíble, podemos pasar a una situación en la que tal vez podamos volver a un número menor de carreras y luego tal vez la posibilidad de una rotación es posible para ciertos Grandes Premios, manteniendo un enfoque en diferentes áreas.
Otra de las necesidades a las que se enfrenta la Fórmula 1 es precisamente la llegada de nuevos fabricantes y equipos. El campeonato le ha visto las orejas al lobo con la marcha de Honda y el limbo en el que se mueven tanto AlphaTauri como Red Bull Racing, así como la constatación pública de que HAAS F1 Team ha valorado en más de una ocasión su salida de la parrilla, los apuros de Williams que terminaron con la venta del equipo a un fondo de inversión y el futuro incierto para Sauber después del que será su último año asociada a Alfa Romeo.
Domenicali pone bajo el foco la necesidad de reducir el coste de las unidades de potencia para la próxima generación de motores, e incluso adelantar su llegada como medida vital para el campeonato, algo que debería llegar en torno a mitad de esta década: “No es posible que la unidad de potencia en la Fórmula 1 pueda costar lo que cuesta hoy. Creo que hay un margen, un gran margen en eso, y uno de los objetivos que tenemos es que nos gustaría involucrar a los equipos y fabricantes para intentar anticiparnos al nuevo motor, incluso antes de lo que se espera y estoy seguro de que podemos hacerlo”. CEO de Lamborghini desde 2016, Stefano deja entrever que quizás Volkswagen deba ser uno de los objetivos de futuro a la hora de atraer marcas que están buscando una plataforma para mostrar su tecnología o tener imagen de marca.
Lo que puedo decir es que estamos en conversaciones con otros fabricantes. Por el momento, prefieren quedarse quietos, pero la buena noticia es que hay otras… empresas, empresas muy importantes, que están realmente interesadas en comprender cuál es el valor que pueden aportar a casa utilizando la plataforma F1. Pero no solo en términos de tecnología, también en términos del valor de lo que la Fórmula 1 puede aportar al fabricante de automóviles
Vía | SkySports