De circuito urbano a circuito urbano y tiramos porque estamos en Canadá. El Gilles Villeneuve vuelve a acoger una de las citas más esperadas del año, y en los primeros 180 minutos de actividad en pista se mantiene en el aire el misterio característico de circuitos que cambian mucho de la noche a la mañana. Ferrari han sido los más rápidos del día (Charles Leclerc al frente), pero el día precisamente ha sido poco limpio para gran parte de la parrilla.
Como la pista, de hecho. La suciedad ha marcado el transcurso de los primeros entrenamientos. Las quejas por radio de los pilotos no han tardado en florecer y las salidas de pista. Eso sí, para la segunda sesión, el asfalto ha estado más a la altura y es cuando, a medias, se han visto los primeros intentos de vueltas rápidas y de tandas largas. Ahí es dónde han llegado los errores.
El más destacable, el de Lewis Hamilton. El británico ha forzado en las curvas 8 y 9, y al pisar el piano disuasorio de la última, la parte posterior le ha jugado una mala pasada y ha impactado de forma contundente contra el muro. Aunque parezca mentira, el contacto sólo ha causado que la goma desllante y el consecuente pinchazo. Por precaución, Mercedes ha cancelado la sesión del británico para revisar posibles daños internos. Ergo, no referencias del líder del mundial que ha sido sexto pese al error.
Al frente, y sin errores, Ferrari. El ya mencionado Charles Leclerc y Sebastian Vettel han sorprendido a propios y a extraños con un 1-2 a nivel de vuelta rápida. Después de la confirmación de la presencia de una evolución en las unidades de potencia de Mercedes, casi todo el mundo esperaba que Hamilton y Bottas volviesen a dominar. En este caso, los más rápidos han sido los de Maranello en un circuito en el que acostumbran a ir bien.
Bottas, por su parte, tampoco ha podido demostrar el verdadero potencial de su Mercedes W10. Su vuelta no ha sido precisamente la mejor, con varias derrapadas y vértices tardíos. Muy desordenada, que dirían los británicos. Eso se ha traducido en una pérdida de tan sólo una décima y media con los Ferrari, por lo que no se sabe hasta que punto el SF90 es competitivo o si realmente los errores les han acabado regalando los mejores tiempos.
Red Bull tampoco ha brillado. Pierre Gasly no ha encontrado el camino correcto y Max Verstappen ha rozado el muro de los campeones después de encontrarse con su compañero en plena vuelta rápida. Por ende, otra vez los errores vuelven a ocultar el verdadero orden de cara al Gran Premio del domingo. Los de Milton Keynes se han quedado a más de un segundo de los Ferrari, aunque en su giro, Verstappen tan sólo perdía tres décimas con Leclerc en el segundo sector.
¿Y quién se ha beneficiado de los errores? Carlos Sainz y McLaren. El madrileño se ha sacado una vuelta estratosférica para ser cuarto. Independientemente de que sean entrenamientos o no, parece que han acertado con la configuración en el equipo británico y tienen parte del trabajo solucionado para un fin de semana en el que la evolución de la pista va a ser la pieza fundamental en la clasificación y en el desgaste de las gomas de cara al domingo.
Porque ese factor es también una incógnita. Con una pista tan sucia, las gomas se comportan de forma muy distinta a lo que ocurre en un circuito normal. El desgaste se multiplica por el polvo en pista, además de temperaturas irregulares y agarre mínimo. Una verdadera prueba para los ingenieros y para Pirelli, que trae los mismos compuestos que en Mónaco. La estrategia, abierta a día de hoy y eso siempre deja carreras movidas.
Mañana se disputará la tercera sesión de entrenamientos libres, en la que realmente se verán las primeras cartas. ¿Mercedes se pondrá manos a la obra? ¿O se confirmará el buen ritmo de Ferrari? Para ello, queda aún tiempo. Y trabajo, que en los boxes no van a descansar.
Foto | Ferrari Media Centre
