Ausente de las dos citas en Motorland Aragón después de haber resultado positivo en Coronavirus, Valentino Rossi afronta las últimas tres carreras de la temporada del Mundial de Motociclismo trabajando para despedirse con un buen resultado de su paso por Yamaha Factory. Sin embargo, antes de centrarse en su futuro con el equipo Petronas, il dottore promete tener un invierno divertido sobre cuatro ruedas, deshojando la margarita sobre si decantarse por competir en una cita mundialista o volver a realizar la habitual carrera de resistencia en Abu Dhabi rodeado de sus amigos y hermano.
Sin embargo, la tentación que supone luchar por la que puede ser su primera victoria en el Mundial de Rallyes parece evidente. Rossi se podría convertir en el primer piloto de la historia que consigue un triunfo en el WRC además de todos los cosechados en el Mundial Motociclismo, desde categorías inferiores hasta 500cc o Moto GP. No sería la primera aparición de Valentino en la máxima categoría de los rallyes, presente anteriormente con un Subaru Impreza WRC en el Rally de Nueva Zelanda y compitiendo hasta en dos ocasiones en el Rally de Gales, una con un Peugeot 206 WRC con los colores de Michelin y una segunda, en 2008, con un Ford Focus RS WRC y la ya conocida librea de Stobart.
Desde entonces, Rossi no ha vuelto a participar en una prueba mundialista, centrándose especialmente en su fructífera carrera en las motos. Ahora, cuando ya encara el final de la misma, surgen ideas de futuro como su más que probable presencia en el Dakar, sin embargo, antes que ese salto al desierto, el italiano parece estar más dispuesto que nunca a volver a participar en el Monza Rally Show después de haberse saltado la edición 2019 para ponerse al volante de un Ferrari 488 con el que compitió en las 12 Horas de Abu Dhabi.
La decisión la tomó después de que los organizadores del evento decidieran que los WRC de la actual generación restaban espectáculo a la competición y se optara por hacer un evento con los R5 como grandes protagonistas, algo que restó atractivo para Rossi, el cual buscaba competir de nuevo en circuitos al volante de un GT3, además de que el Monza Rally Show es un evento en el que ya había vencido hasta en siete ocasiones. De participar, este año le tocará aun así aprenderse las nuevas especiales que se realizarán también lejos de las instalaciones del Autódromo.
Conozco Monza y mucha gente me ha llamado antes. El plan era no correr en Monza ya que quería hacerlo en Abu Dhabi como el año pasado. Por supuesto, la situación ha cambiado y hacer la última ronda del campeonato mundial hace que esa perspectiva sea mucho más interesante. Ahora tengo que ver qué está pasando – Valentino Rossi
Y es que la posibilidad de conseguir un buen resultado en una prueba mundialista promete ser muy atractivo para aquellos pilotos de circuitos y de otras disciplinas que puedan ver reducido ese proceso de adaptación, con el problema de que hubiese sido una buena ocasión para ver a competidores de la Fórmula 1 como Valtteri Bottas o Kimi Räikkönen dejándose ver por la carrera, situación que parece descartada debido a la coincidencia con la segunda carrera en Bahréin. Aun así, se viene rumoreando otros posibles nombres, entre ellos el de Robert Kubica, al que únicamente le queda correr la cita de Hockenheim en el DTM.
Aunque han pasado casi cuatro décadas, hay que recordar que en el pasado, además de algunas carreras de campeones en la que participaban pilotos de la Fórmula 1, se organizó en 1983 un RallySprint con la BBC como principal promotor en el que se reunieron tanto pilotos de rallyes como circuitos, con las presencias destacadas de Tony Pond y Nigel Mansell.
Fotos | Monza Rally Show y Valentino Rossi