Con la nueva era dorada de la resistencia, muchos pilotos buscarán hacerse un hueco entre las principales alineaciones que competirán en las clases reinas tanto del WEC como del IMSA. Con más asientos disponibles, algunos de los pilotos que aparentemente estaban fuera de las quinielas o provienen de otras disciplinas parecen haberse animado a probar suerte y si bien seguimos sin conocer si Sébastien Ogier tendrá finalmente la oportunidad, parece que al menos Valentino Rossi sí que lo intentará.
El italiano afrontará un nuevo reto en 2023, con un cambio respecto del Audi R8 LMS GT3 que ha empleado durante este año para cambiarse a un BMW M4 GT3 de nuevo operado por el equipo WRT. Il Dottore, presente durante este fin de semana en el Circuito Ricardo Tormo de Valencia con motivo del último Gran Premio de la temporada de MotoGP, aclaró que volverá a competir dentro del GT World Challenge Europe, deslizando además que contará con el apoyo de la firma bávara.
Este año corrí con el Audi, pero el año que viene estaré en el BMW. Me convertiré en piloto de fábrica y estoy muy feliz. Ya he probado el coche, seguiré en el mismo equipo que la temporada pasada, solo estamos cambiando de coche. WRT había estado con Audi durante 15 años, pero BMW fue elegido para 2023. Lo probé el lunes después de la última carrera en Barcelona. Es hermoso, muy moderno, biturbo, más grande que el Audi. Parece más fácil de conducir – Valentino Rossi
De esta forma, se abre también una oportunidad nueva si tenemos en cuenta que, en 2024, las 24 Horas de Le Mans también acogerán a la reglamentación GT3 como la sustituta de los actuales GTE, los cuales apenas dispondrán de la clase GTE-Am en la próxima edición. Para Rossi no sólo se le plantea el poder cumplir un sueño deportivo como es el de correr la clásica francesa, sino que también persigue la oportunidad de que BMW le deje probar su nuevo LMDh para así de paso descubrir si tiene las condiciones para poder dar otro salto de categoría.
En un principio, esta oportunidad también parecía estar disponible con Audi y sus lazos con WRT, pero evidentemente, la caída del programa de desarrollo del LMDh por parte de la firma de los cuatro aros (la cual reveló que se encontraba muy cerca de su versión final previa a los test), terminó por echar por tierra la oportunidad y llevó al equipo polaco a cambiar de aires. En el caso de Rossi, habló abiertamente ante los micrófonos de Sky Sport que está entusiasmado por la oportunidad de probar un prototipo: «Me gustaría probarlo, esperamos organizar una prueba. Luego, sin embargo, será necesario comprender qué tan rápido seré para convertirme en un piloto de Hypercar. Será un desafío difícil».
