La GP Ice Race se ha convertido ya en una cita tradicional para las marcas del Grupo Volkswagen. En ella, los distintos fabricantes llevan a algunos de sus vehículos de competición más prestigiosos, no solo para exhibirlos a miles de metros de altura en Zell am See, sino también para verlos rodar sobre una gruesa capa de hielo. Allí no solo se han atrevido a rodar los Skoda Fabia R5 (ahora conocido como Rally2) o el Audi Quattro S1, sino que algunos de los representantes de circuitos también han salido a unas condiciones muy distintas a las que se suelen encontrar.
Este año, Volkswagen ya ha confirmado que entre sus vehículos presentes estarán algunos de sus vehículos más icónicos, con el Volkswagen Escarabajo de rallyes y el Beetle que compitió hasta la pasada temporada en el ARX, el Campeonato Americano de RallyCross. La razón parece obvia después de que 2019 fuera el último año en producción de este modelo que ha escrito la historia de los de Wolfsburgo.
Sin embargo, no estarán solos. Allí estará presente un Golf R TCR muy especial ya que estamos hablando de un prototipo eléctrico con tracción a las cuatro ruedas que Volkswagen quiere emplear como embajador de sus vehículos eléctricos. Junto a él también estará el Volkswagen I.D. R Pikes Peak que consiguió los récords en Nordschleife, Tianmen, Pikes Peak o Goodwood. Y es que seguramente haya entre ambos algo más de relación que la de que ambos sean propulsados por motores alimentados por baterías.
¿Qué sentido tiene ahora presentar un Golf eléctrico de carreras?
Aunque Volkswagen no ha especificado el origen de esta unidad tan especial, todo parece indicar que puede ser la misma que vimos camuflada en los inicios del proyecto Pikes Peak. Ya os hablamos de la misma, en este caso pilotada por Romain Dumas y en unas jornadas de test que buscaban probar algunos elementos del tren motriz y el comportamiento de las baterías en condiciones meteorológicas extremas. El piloto francés solo tendría esa experiencia previa antes de poder montarse en una versión casi definitiva del Volkswagen I.D. R en este caso ya sobre el asfalto del Circuito de su localidad natal, el de Alés.
¿Por qué llevar este coche y no el Volkswagen Polo R del World RX o el World Rally Car que nunca llegó a debutar? Obviamente aquí se está intentando escenificar el nuevo futuro en competición de Volkswagen Motorsprt, la cual anunciaba a finales de 2019 su decisión de no apoyar más proyectos oficiales en campeonatos con motores de combustión interna. Aunque también puede dejar abierta la puerta a que haya un programa en el E-TCR, en el que sería el Volkswagen ID. 3 el que tendría prioridad sobre el Golf a la hora de entrar en competición. Solo el tiempo lo dirá.
