No suele ser habitual que los fabricantes nos dejen ver cómo ha sido el desarrollo aerodinámico, especialmente en todo lo concerniente al trabajo realizado en el túnel del viento, sin embargo, hay contadas excepciones en las que los equipos abren las puertas de par en par para contarnos lo que puede ser un uno por cierto de todos los secretos que se ocultan detrás de cada proyecto. En el caso del Grupo VAG, hemos visto que últimamente han estado incluso más predispuestos a ello, seguramente porque sus dos últimos vehículos de competición con alma de prototipo no tienen ningún rival que vayan a estar muy atentos para sacar ventajas en competición.
Tal y como nos confesaba François-Xavier Demaison en la presentación del vehículo, el equipo que se ha encargado del área aerodinámica ha tenido que tener en cuenta la gran variabilidad de la presión del aire entre la salida, a 2.900 metros sobre el nivel del mar, y la llegada, donde el hombre bandera espera a los competidores con su ya conocido jersey ajedrezado a 4.302 metros de altura. Con la baja presión de la cumbre, la aerodinámica no puede trabajar con la misma efectividad que miles de metros más abajo, perdiendo alrededor del 35% de carga respecto a la que tendría el mismo vehículos a nivel del mar.
A la altitud a la que se encuentra Pikes Peak el aire a través del que estamos conduciendo es de media un 35% menos denso. Como resultado, perdemos un 35% de la carga aerodinámica en comparación con un circuito a nivel del mar. El enorme alerón trasero nos permite compensar una parte de esta pérdida de carga aerodinámica
Obviamente se ha desarrollado un vehículo eléctrico con filosofía de prototipo que trabaja aerodinámicamente de forma de que Romain Dumas tendrá apoyo en curva rápida, pero sin tener que sacrificar demasiada velocidad debido al drag (la punta se estima que sean los 240 km/h anunciados oficialmente). Una de las preguntas que le pudimos hacer a Demaison giró en torno a la opción de incluir algún tipo de sistema de activo, al estilo DRS como el que ya utiliza el Porsche 919 Hybrid Evo LMP1, sin embargo, el responsable técnico de Volkswagen Motorsport nos confesó que se había descartado después de unos primeros estudios iniciales ya que el peso extra que hubiera supuesto el sistema sería mayor que la ganancia de utilizarlo.
¿Preparados para ver cómo nace un vehículo de competición y cómo se produce su desarrollo y elección de piezas? Este breve vídeo del prototipo a escala 1/2 rodando en el túnel del viento que tiene Porsche en Weissach es un perfecto resumen para hacernos a la idea de todo el trabajo que hay detrás, tanto de impresión en 3D, diseño, escalado y prueba.