Aunque escribimos hace unas semanas que el Mundial de Turismos parecía haber encontrado cierta tranquilidad frente a los problemas de certámenes más populares como el DTM o el Mundial de Resistencia, ese equilibrio es ciertamente frágil y cualquier mala noticia lo puede romper. Como podría ser la marcha de una de las dos marcas presentes oficialmente, Volvo. El cambio de filosofía de Polestar no invita al optimismo.
Volvo lleva tiempo queriendo apostar fuerte por los vehículos eléctricos y parece haber decidido que Polestar, como división tope de gama, pase a producir de forma exclusiva coches cero emisiones. El primero de ellos según el diario sueco Expressen se presentará el próximo mes de octubre. Y ello choca frontalmente con la presencia de Polestar Cyan Racing en el WTCC. Según Hakan Samuelsson, CEO de Volvo, «desde luego no vamos a competir a largo plazo con coches de gasolina. Tenemos un contrato (con Cyan Racing), pero si hacemos algo tiene que ser para reforzar la marca Polestar, que va a cambiar».
Expressen interpreta esto como una probable salida del WTCC, aunque las palabras de Samuelsson no permiten descartar una presencia semioficial de Cyan Racing, independiente de Volvo desde 2015. Sin embargo la publicación escandinava tampoco se atreve a aventurar si Volvo daría el paso hacia la Fórmula E, estudiada por la marca desde hace años.
Foto | Polestar Cyan Racing