El día de ayer se realizó la carrera de clasificación para definir la parrilla de las próximas 24 Horas de Daytona y allí Ricky Taylor con el Acura ARX-05 de Wayne Taylor Racing aseguró la pole entre los DPi al contener en la última vuelta a un entusiasta Richard Westbrook, quien no pudo pasar con el Cadillac de JDC-Miller Motorsports por el carril interno de la pista y perdió el control del coche. Sin embargo pudo mantener el segundo lugar en la formación. El tercer lugar correspondió a Kamui Kobayashi con el Cadillac del Ally Racing.
La prueba tuvo una duración de 100 minutos y Taylor asumió la delantera después de la última serie de detenciones en boxes. La estrategia fue la adecuada y por lo tanto el equipo ganador de la pasada edición de la carrera aseguró el lugar de privilegio para una formación que incluye a Filipe Albuquerque, Alexander Rossi y Will Stevens. El cuarto lugar quedó en manos del otro Acura, el de Meyer Shank Racing, al cual Oliver Jarvis llevó a la línea de meta. Más atrás finalizaron los coches de Chip Ganassi Racing, cuarto y quinto lugar respectivamente, con Sebastien Bourdais como el mejor ubicado.
Entre los LMP2 la victoria representó un uno-dos para PR1/Mathiasen Motorsports con Ben Keating y Mikkel Jensen al volante del coche ganador, por delante de Jonathan Bomarito y Steven Thomas. Tercero finalizó el coche de G-Drive Racing. En lo que respecta a los LMP3, la carrera fue un verdadero dolor de cabeza pues hasta cinco de los nueve inscritos confrontaron serios problemas y se vieron obligados a abandonar, el resto no escapó a incidentes, quedando como ganador el coche inscrito por Andretti Autosport con Jarett Andretti y Josh Burdon con una vuelta de ventaja sobre el prototipo del equipo Muehlner Motorsports America.
La Clase GTD-Pro tendrá a Mirko Bortolotti y Adrea Caldarelli en posición de privilegio con el Lamborghini Huracán de TR3 Racing. La definición llegó a unos quince minutos del final cuando Bortolotti rebasó a Alessio Picariello, piloto del Porsche 911 GT3 R número 79 de WeatherTech Racing. Tercero en esta clase culminó el Porsche número 9 de Pfaff Motorsports con Felipe Nasr demostrando que requiere un mayor período de adaptación con este tipo de coches.
En lo que respecta a la división GTD, el triunfo correspondió al Mercedes-AMG GT3 Evo de Winward Racing con Lucas Auer y Russell Ward compartiendo la cabina. El McLaren 720S GT3 de Crucial Motorsports llegó segundo, en tanto el Porsche 911 GT3R de Wright Motorsports finalizó tercero. En pista no se advirtió una marcada superioridad de los GTD-Pro con respecto a los GTD. La mayor decepción fue para Corvette Racing cuyos C8 modificados apenas llegaron a la meta en los puestos ocho y nueve. Representantes del equipo manifestaron que el Balance de Rendimiento no es el adecuado ya que inclusive le aumentaron la potencia para esta carrera clasificatoria y ni aún así mostraron un ritmo competitivo como para estar más arriba de los lugares en los cuales llegaron.