No por esperada la decisión fue menos sorprendente. Después de muchos rumores, de cierto silencio de radio y la compra de Lawrence Stroll de una parte del accionariado de Aston Martin, la firma británica anunciaba su decisión de pausar el proyecto del Valkyrie para el Mundial de Resistencia. Entre los motivos que se esgrimían estaba la decisión de introducir la reglamentación LMDh, una normativa técnica que rebajaba mucho los costes, precisamente algo que le hizo a Aston Martin replantearse su programa al ver que los costes de derivar para la competición un coche de producción cuyo precio de venta es cercano a los 3 millones de euros, hubieran sido astronómicos.
Su marcha dejaba una vez más a Toyota en solitario, esperando para enfrentarse en el WEC 2020-21 a un equipo de competición como ByKolles y a un fabricante de pequeño tamaño como la Scuderia Cameron Glickenhaus. A partir de este punto, todos se plantean cómo salvarán la papeleta un año más el ACO y la FIA, con Ginetta ofreciéndose a correr otra temporada con sus prototipos LMP1. El propio Gerard Neveu, responsable del WEC, ha apuntado a que se le dará prioridad a la finalización de la plataforma LMDh que servirá para aunar ACO e IMSA bajo las mismas reglas, y que con ellas ya finalizadas se espera que esto de una corriente positiva
Acabamos de enterarnos hace unos días sobre la decisión de Aston Martin, que es la única que impacta la próxima temporada porque Rebellion ya estaba enfocado en el programa Peugeot para 2022. Hemos abierto una sesión de trabajo ahora con Pierre Fillon, y con personas clave en el ACO, así como también con personas de la FIA. El WEC estará aquí la próxima temporada con seguridad y tendrá la presentación antes de que abramos el registro de inscripciones. Los equipos tendrán que saber exactamente cuál es el formato del campeonato.
Sin un plan en concreto acerca del WEC 2020-21 más allá de definir el futuro de los LMDh, los cuales se presentarán en el Super Sebring que tendrá como protagonistas ambos campeonatos de resistencia, lo que parece claro es que una vez más ha sido Toyota la gran perjudicada. Con su proyecto en los plazos esperados de cara a debutar en Silverstone a la vuelta del verano, se encuentra con que ByKolles es acompañada por un mar de dudas como suele ser habitual, mientras que SCG se especula que no llegaría hasta Kyalami, a lo que hay que sumar que se ha ajustado a un reglamento más caro que el de los LMDh tal y como es el de unos LMH (Hypercars) que todavía no saben si podrán competir en el IMSA. En este punto, se espera que Toyota Motorsport GmbH estará presente en la próxima reunión entre el ACO-IMSA, antes del anuncio que se realizará en el fin de semana de Sebring para aclarar todas las dudas.
Dependiendo de si nos está yendo muy bien en el tiempo después de este anuncio, nos dará una indicación de cómo será el campeonato en 2021 y nos ayudará a tomar la decisión correcta para el formato del campeonato 2020-21. WEC estará aquí en 2020-21, sin duda, y probablemente trabajaremos en modificaciones y adaptaciones muy pequeñas, dependiendo de cuál sea la configuración final.
Vía | Sportscar365