El clima llegaba enrarecido a Nürburgirng. Los Hyundai i30 N TCR estaban presentes, pero tras el anuncio de la decisión tomada por los equipos que compiten en el WTCR, tocaba recoger bártulos y volver a meter las unidades dentro de los camiones, mientras que la FIA y Eurosport Events adoptaban un discurso conciliador para tratar de que no se vuelva a repetir la ausencia el segundo fin de semana de octubre en Eslovaquia.
Sí estaban en cambio los coches de la firma surcoreana en las 24 Horas de Nürburgring, pero “en la mesa había cuatro platos menos” en lo que era la lucha por la victoria, algo que se notó a pesar del pobre rendimiento de los i30 N en Zolder. El duelo se volvió a convertir en una cuestión de dos, con los Honda de JAS Performance frente a las unidades de Lynk&Co de Cyan Racing, siendo Esteban Guerrieri el primero en golpear después de imponerse en la primera carrera, disputada el viernes y bajo un intenso aguacero que convirtió en todo un reto la competición ya que además era la primera vez en que los pilotos rodaban con los Goodyear sobre mojado.
El argentino, que ya sabía lo que era lograr un buen resultado en el infierno verde, le ganaba el mano a mano a Yvan Muller, llegando incluso a protagonizar ambos un intenso puerta con puerta en el que terminó imponiéndose el Honda Civic Type R TCR por delante de toda la armada de la firma china, encabezada por el francés y seguida por su sobrino, Yann Ehrlacher (salía desde la sexta plaza en la parrilla invertida y aun así legó para ser tercero al final de las tres vueltas) y por Thed Björk. Precisamente Tom Coronel intentaría frenar a la avalancha azul, pero un movimiento del piloto sueco que terminó con contacto entre ambos abrió la puerta al líder del WTCR para sumar unos puntos vitales que refrendan la evolución del joven piloto.
Mala suerte para Nathanaël Berthon, quien se vio obligado a salir tarde desde el pit lane cuando era teóricamente el hombre de la pole, remontando hasta la 12ª plaza y demostrando que hubiera tenido velocidad para luchar por metas mayores. Fue una carrera accidentada, con la colisión entre Santiago Urrutia (cuando perseguía el sexto puesto) y Attila Tassi, el abandono de Mikel Azcona por problemas técnicos y el impacto de Jack Young con el Renault Mégane RS TCR de Vuković Motorsport que le reportó grandes daños y que le impidió estar en la carrera del sábado.
Yann Ehrlacher se da el gustazo de ganar en el Infierno:
La segunda carrera el guion sería ligeramente distinto, siendo en esta ocasión Yann Ehrlacher el que asaltaba el liderato de Néstor Girolami para afianzar su primera posición en el campeonato tras dos fines de semanas de competición. Aprovecharía la velocidad del Lynk&Co 03 TCR para adelantar en el último sector, sacando todo el partido a la punta en la larga recta de Döttinger Höhe para ponerse líder al final de la primera vuelta y construirse una ventaja que le permitiría afrontar el resto de giros antes de celebrar su segundo triunfo en esta campaña.
Sería una victoria que si cabe sabía mejor, debido al escenario, el imponente Nordschleife, la experiencia de los rivales y las condiciones meteorológicas que han acompañado a las carreras durante todo el fin de semana y que obligaron incluso a detener las 24 Horas de Nürburgring. En el caso de Girolami, su penalización de 30 segundos sería un golpe muy duro de cara a salir de aquí con un buen resultado tras llegar aquí siete puntos por detrás del líder. El argentino no cumplió con las reglas que permiten dos vueltas de reconocimiento y una pasada por el pit-lane antes de alinearse en la parrilla, haciendo en su lugar tres vueltas de reconocimiento y dos pasos por boxes antes de la carrera.
Thed Björk completó el doblete de los Lynk&Co al adelantar a Girolami, mientras que Tassi se quedaba con la tercera posición del podio después de que se aplicara la sanción a Néstor, el cual caía hasta la undécima plaza. Mikel Azcona también ganaba una, logrando meterse en la cuarta posición final y logrando el mejor resultado del Cupra León Competición desde su debut en el WTCR. Fue una carrera de supervivencia para el español, ya que en la primera vuelta sufriría un pequeño toque en el Karussell que le dejaría tocada la dirección el resto de la prueba.
Esteban Guerrieri se quedaría con el último puesto entre los cinco primeros, mientras que Jean-Karl Vernay colocaba el Alfa Romeo Giulietta Veloce TCR de Romeo Ferraris sexto, justo por delante de Yvan Muller. Ehrlacher es líder de la clasificación con 31 puntos sobre Girolami y Thed Björk, empatados a puntos