Por cada coche nuevo que se matricula en España se venden dos de segunda mano, o algo menos, puesto que si hemos de ser rigurosos la cifra exacta de coches matriculados en 2018 fue de 1.321.438 unidades, y de 2.276.344 coches de segunda mano vendidos. En cualquier caso, el mercado de segunda mano es muy representativo en España. Ahora bien, hablemos de comprar un coche de segunda mano en 2019 y, sobre todo, qué deberías saber antes de cerrar la compra en lo referente a restricciones, emisiones y etiqueta medioambiental. Ver ofertas de coches de segunda mano en ¿Qué coche me compro?
Comprar un coche de segunda mano en 2019: restricciones al tráfico
Es importante destacar que, a día de hoy, las restricciones al tráfico relacionadas con las emisiones de los automóviles, y los episodios de alta contaminación, únicamente afectan a grandes ciudades, como Madrid. De ahí que este aspecto sea especialmente importante para cualquiera que quiera moverse en el entorno de una gran ciudad y no tanto para aquellos que busquen un coche para moverse por áreas rurales, o en las que aún no se han previsto restricciones al tráfico, ni parezca que vayan a imponerse en un futuro próximo.
Incluso en ese caso, es importante tener en cuenta que cada vez serán más las ciudades que impondrán restricciones al tráfico y que irán aplicándose en función del instrumento que Tráfico ha creado para ello, la etiqueta medioambiental, o etiqueta de emisiones. También hay que tener en cuenta que el precio de compra de un coche, y de reventa, también girará en función a este etiquetado, también en coches de ocasión vendidos fuera de las grandes ciudades, por el elevado volumen de automóviles de segunda mano que se venden en áreas como Madrid, Barcelona, y su periferia.
La etiqueta medioambiental en un coche de segunda mano
Por lo dicho anteriormente, si compramos un coche de segunda mano es importante que goce de la etiqueta medioambiental más favorable. Los híbridos, el GNC y el GLP, cuentan con la etiqueta más favorable, la ECO, después de la etiqueta Cero Emisiones de los eléctricos y los híbridos enchufables.
Tras los ECO y los Cero Emisiones, los etiquetados con el distintivo de emisiones C serán los más deseables. Aquí incluimos a todos aquellos coches con motor diésel matriculados a partir de enero de 2014, y todos los coches con motor de gasolina a partir de 2006. Es importante destacar que este distintivo es el mismo que llevan los coches nuevos, que se están matriculando este mismo año, con motor diésel y gasolina. Ver ofertas de coches diésel de segunda mano posteriores a 2014.
Los etiquetados con el distintivo de emisiones B son aquellos coches de gasolina matriculados desde enero de 2000 y coches diésel desde 2006. Los matriculados antes de estas fechas no cuentan con distintivo de emisiones y, en el corto y medio plazo, serán los que más problemas tengan derivados de las restricciones al tráfico. En Madrid, por ejemplo, en episodios de alta contaminación (escenario 2), no pueden circular por la vía de circunvalación M30 y el interior de esta.
La normativa de emisiones que cumple el coche
A pesar de que Tráfico ha comunicado un sistema de etiquetado basado en la fecha de matriculación, como os contábamos en el anterior apartado y que, de hecho, las etiquetas se han asignado teniendo en cuenta ese dato, la normativa dicta que el distintivo de emisiones no depende de la fecha de matriculación, sino de la normativa de emisiones para la cual fue homologado el coche.
Eso quiere decir que en algunos casos habrá coches que fueron matriculados antes de las fechas mencionadas, y podrían disponer de una etiqueta de emisiones más favorable. La etiqueta C, por ejemplo, correspondería a coches de gasolina Euro IV, Euro V y Euro VI, así como a diésel Euro VI. La etiqueta B correspondería a coches de gasolina Euro III y diésel Euro IV y Euro V.
Si es el caso del vehículo que vas a comprar, existe un procedimiento para solicitar la etiqueta medioambiental que te corresponde.