La Unión Europea quiere tomarse muy en serio la seguridad en carretera. Las medidas propuestas, como obligar a instalar ayudas que permitan frenar automáticamente a un coche para evitar una colisión o un atropello, para muchos serán imprescindibles, e incluso llegarán tarde. Para otros, podrían ir demasiado lejos, por ejemplo obligando a instalar cajas negras. De momento, la Comisión Europea ha llegado a un acuerdo para conseguir sacar adelante esta medida que inicialmente se esperaba instaurar en 2021. Estos son los 10 sistemas de seguridad que serán obligatorios en los coches en 2022.
Los 10 sistemas propuestos como obligatorios en coches nuevos en 2022
* Asistente avanzado de frenada de emergencia
* Bloqueo del automóvil con alcoholímetro
* Detector de somnolencia o pérdida de atención en el conductor y sistemas de reconocimiento y prevención de distracciones
* Caja negra, un registro de eventos para desentrañar el desencadenante y el culpable de un accidente
* Sistemas de retención mejorados (cinturones de seguridad) para pasajeros en las plazas delanteras
* Superficies ampliadas en el frontal para absorber el impacto en atropellos, y lunas de seguridad
* Asistentes de velocidad de crucero adaptativos
* Ayudas activas para el mantenimiento del coche en el carril
* Protección añadida para la protección de los pasajeros en impactos laterales
* Cámara trasera y sistemas de detección de obstáculos, mediante sensores, para maniobrar marcha atrás
Como os decíamos, la Comisión Europea habría llegado a un acuerdo provisional, con el que se introducirían como obligatorios en coches nuevos en 2022 todos estos sistemas de seguridad. Recordemos que esta medida lleva proponiéndose desde hace años, y que la propuesta más avanzada, el año pasado, proponía introducirla en 2021. Tras el acuerdo, solo queda que se formalice su aprobación en el Paralmento Europeo.
Según los estudios elaborados por la Comisión Europea, estas medidas que serán obligatorias en 2022, y que también se irán introduciendo en vehículos comerciales y de transporte de pasajeros, en furgonetas, autobuses, y camiones, podrían conseguir salvar más de 25.000 vidas, y 140.000 heridos graves, hasta el año 2038.
Pero el objetivo de la Comisión Europea es aún más ambicioso, garantizar que en 2050 nadie fallezca en accidentes de tráfico.