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A los que somos verdaderos obsesos de los coches, tener el vehículo sucio nos provoca una verdadera comezón interior, que no remediaremos hasta que visitemos nuestro centro de lavado favorito. Llevar el coche limpio tiene claros beneficios para el estado de la carrocería y el habitáculo, pero además, puede evitarte multas de considerable importe. Tal y como dice el título de este artículo, pueden multarte por conducir un coche sucio. A continuación descubrirás en qué circunstancias y bajo qué supuestos puede ocurrir esto. Quédate con nosotros, y conocerás estas multas completamente evitables.
Poca o nula visibilidad de la matrícula del coche
Si la suciedad impide ver correctamente la matrícula del coche – y por tanto, impide su correcta identificación a ojos de los agentes de la ley o cinemómetros – incurrimos en una infracción que puede acarrear multas de hasta 200 euros. Si hemos transitado por una zona que puede haber ensuciado las matrículas recuerda limpiarlas lo antes posible. Una matrícula dañada, deteriorada, doblada o ilegible, acarreará sanciones similares, además de un fallo en la ITV – que en casos extremos, puede comportar un resultado desfavorable de la inspección.
Si la matrícula hubiera sido sido alterada o manipulada para impedir su legibilidad, estaríamos hablando de una infracción muy grave. Una infracción que conlleva multas de hasta 6.000 euros, la retirada de seis puntos del carnet y la inmovilización del vehículo en el acto.
Mala visibilidad por cristales demasiado sucios
Si hemos estado circulando por una zona embarrada – sería aplicable tras una ruta 4×4, por ejemplo – ha nevado u otras circunstancias similares, nuestros cristales deben estar limpios para garantizar nuestra correcta visibilidad. Si las lunas no ofrecen una correcta visibilidad, podemos ser multados con 200 euros. Es una cantidad considerable, pero de nuevo, no comporta pérdida de puntos. Ahora bien, antes de que llegue la multa, deberíamos ser los primeros en garantizar que podemos ver correctamente a través de los cristales del coche.
La que está en juego, principalmente, es nuestra seguridad. Además, los limpiaparabrisas, en función con el líquido limpiaparabrisas – cuyo nivel debe ser periódicamente revisado – deberían solucionar rápidamente este problema. Las escobillas de los «limpias» también deben estar en buen estado: si están muy degradadas, están ausentes o no funcionan bien, podemos ser multados. La multa en este caso es de 80 euros. Si el resto de cristales están tan sucios que no se puede ver a través de ellos, lávalos lo antes posible, aunque sea de forma improvisada.
Además de por seguridad, es sentido común.
Faros sucios o degradados
Los faros son otro de los motivos por los que puedes ser multado por la autoridad. Es el mismo problema de las matrículas o el parabrisas: si los faros están tan sucios que el alumbrado no puede hacer su función correctamente, además de impedir ver y que nos vean correctamente, estaremos comprando papeletas para recibir una multa de 200 euros. Dicho sea de paso, el mal estado de limpieza del alumbrado es perceptible a poco que se haga de noche, por lo que es nuestro sentido común el que tiene que entrar en funcionamiento antes de que llegue la multa.
En verdad, es la misma multa que recibiremos por circular con una luz de cruce fundida, como ya te contamos en su momento. Si notas que tu coche alumbra muy poco y has estado circulando por una zona embarrada o una zona con nieve, bájate del coche y limpia los faros con una bayeta o trapo – o unos pañuelos de papel, en su defecto. La autoridad también nos puede multar si la carcasa de los faros está tan degradada que se ha vuelto opaca o amarillenta, algo que puede ocurrir en coches antiguos, o en coches con faros de plástico que han estado muy expuestos al sol.
Si consideran que nuestro coche no alumbra lo suficiente, también podremos ser multados.
Recuerda, cuando vayas a lavar el coche, no lo hagas en la calle
Una última advertencia a navegantes. Si vas a lavar el coche, hazlo en un espacio privado o hazlo en un espacio destinado al lavado. Si lavas el coche en plena calle, estarás cometiendo una ilegalidad. Una ilegalidad penada con multas que oscilan entre los 30 y los 3.000 euros – el extremo superior implica el vertido de sustancias tóxicas y otras actitudes muy reprobables. No te la juegues, y lleva el coche a tu centro de lavado de referencia.