La Dirección General de Tráfico tiene previstas toda una serie de sanciones que pretenden ser proporcionales a la infracción cometida, y que van de las multas económicas más pequeñas, hasta aquellas que son realmente cuantiosas, detraen puntos del carné de conducir, e incluso se tramitan por la vía penal, pudiendo comportar penas de prisión. Ahora bien, hoy os hablaremos de una de las mayores multas que te puede poner la DGT y, concretamente, de un caso en el que una conductora empleó una matrícula falsa para eludir los controles de velocidad, para que veamos que estamos ante un sanción realmente seria.
Así es la multa por emplear una matrícula falsa
Emplear una matrícula deteriorada comporta una multa de 200 euros, sin detracción de puntos. No obstante, existe un caso aún más flagrante, que es aquel en el que un conductor emplea una matrícula falsa. La DGT sanciona la manipulación de la placa de matrícula con una multa de 6.000 euros y la pérdida de 6 puntos del carné.
Por otro lado, la manipulación de la matrícula puede trasladarse a la vía penal, de manera que el infractor tenga que enfrentarse a un delito de falsificación de documento público. Este delito está sancionado con penas de prisión de 3 a 6 años y una multa de 6 a 24 meses. Con lo cual estamos hablando de una infracción realmente seria.
Utilitzava una matrícula falsa per no pagar les multes de radar. En va acumular fins a 80 per un import de 8.000€. A més, l'hem denunciada penalment per falsificació de document públichttps://t.co/z85yKqlxHh pic.twitter.com/nHyuQSztJE
— Mossos (@mossos) February 8, 2020
Cazada con una matrícula falsificada
El 8 de febrero de 2020, los Mossos d’Esquadra anunciaban en una nota de prensa que habían identificado a una conductora que durante dos años había estado utilizando una matrícula falsa. En ese tiempo, la conductora habría desviado hasta 80 multas de radar, con 8.000 euros en sanciones acumuladas que, por el empleo de una matrícula falsa, no habían llegado a su destinataria.
El departamento de tráfico catalán descubrió que se estaban generando multas a un vehículo cuya placa de matrícula no se correspondía con la marca y modelo que aparecía en las fotos de los radares, y lo que es aún más llamativo, a un vehículo que había sido dado de baja en 2001. Se iniciaba entonces un proceso para relacionar el vehículo de las imágenes con su verdadera placa de matrícula. Fue entonces cuando se descubrió que uno de los números de la matrícula 8691, más concretamente el 9, había sido sustituido por un 7, para que los radares registraran la matrícula 8671.
Como os decíamos, esta conductora se enfrentará ahora a una de las mayores multas que tiene prevista la DGT. Para empezar, tendrá que pagar las 80 multas por exceso de velocidad acumuladas. Y no solo eso, se enfrentará a 6.000 euros de multa por manipular la matrícula y tendrá que afrontar una denuncia penal por delito de falsificación de documento público.
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