La Dirección General de Tráfico cuenta con más medios, cada vez más sofisticados, para vigilar los excesos de velocidad. En los últimos meses hemos visto cómo la DGT instalaba nuevos radares, en este caso centrándose sobre todo en las carreteras convencionales. Pero también está desarrollando nuevas estrategias para evitar que los conductores excedan los límites máximos de velocidad de las carreteras. Ya os hemos hablado de los radares en cascada y, tras ellos, trascendía un nuevo concepto que, en realidad, no tiene nada de novedoso, el de los radares dobles. Ahora bien, ¿en qué consisten los radares dobles y por qué te pueden multar dos veces seguidas?
De los radares en cascada, a los radares dobles
La idea de los radares en cascada resultaba ciertamente novedosa. En muchos casos podríamos haber sospechado que la DGT instalase controles de velocidad con vehículos camuflados cerca de controles, ya conocidos, mediante radares fijos. Pero no parece que hubieran estado llevando a cabo esta práctica hasta hace unos años, que se confirmaba que la Policía Foral de Navarra estaba llevando a cabo una prueba piloto en la que instalando un radar camuflado poco después de un radar fijo intentaban captar a aquellos conductores que se han acostumbrado a frenar en los radares fijos, para acelerar de nuevo y continuar excediendo los límites de velocidad poco después.
El objetivo final sería evitar que los conductores excedan los límites de velocidad, independientemente de que haya radares o no. Y es cierto que la proliferación de navegadores GPS y aplicaciones móviles con avisador de radares, basados en la base de datos de radares de Tráfico, han conseguido que los excesos de velocidad y, por lo tanto, las multas en radares fijos, disminuyan, pero no en el resto de tramos.
Como os decíamos, los denominados «radares dobles» no tienen nada que ver con los radares en cascada y de hecho no es una problemática nueva. Aunque no sea la práctica habitual, Tráfico dispone en algunos casos de radares fijos que apenas están separados por unos kilómetros, radares independientes, en diferentes puntos kilométricos, en los que si excedes los límites de velocidad en todo el tramo pueden multarte dos veces, una por cada radar.
Dos multas, en dos radares diferentes, en unos minutos
En el pasado hemos visto diferentes historias de conductores que han recibido varias multas por exceso de velocidad en un mismo tramo. En 2019 conocíamos la historia de una conductora (ver noticia en Las Provincias) que había recibido dos multas por exceso de velocidad, con apenas unos minutos de diferencia. Las multas habían sido emitidas por dos radares diferentes, muy cerca el uno del otro, y con límites de velocidad especialmente bajos para una autovía, por la existencia de un túnel.
El caso en cuestión que se menciona es el de la autovía del Cantábrico, la A-8, que a su paso por Asturias tiene tramos con radares fijos muy cercanos entre sí, separados por apenas 8 o 10 kilómetros. En sentido creciente, por ejemplo, hay radares en los puntos kilométricos 355, 362.6, 371.2, 386.14 y 396.05. Mientras que en sentido decreciente hay radares en 396.6, 385.245, 372.65, 366.93 y 355.88. Insistimos en que no es algo novedoso, ni una estrategia especial de Tráfico, y la existencia de varios radares fijos en un tramo muy corto suele responder a situaciones concretas, como tramos con túneles, o con especial peligrosidad.
Ni Pegasus, ni el mismo radar fijo, pueden multarte dos veces seguidas en el mismo instante.
¿Te pueden multar los radares dos veces seguidas?
Pese a que exista un mito relativamente conocido que diga que no te pueden multar varias veces por el mismo concepto, sí es cierto que, en este caso, los radares fijos te pueden multar varias veces seguidas por exceso de velocidad. Y salvo que existan defectos de forma, o cualquier error en la denuncia, será difícilmente recurrible, en tanto la sanción ha llegado en dos instantes diferentes, y por dos radares diferentes, que han pasado los controles metrológicos pertinentes.
Incluso podrías ser sancionado por exceso de velocidad varias veces seguidas por el mismo radar, siempre y cuando sea en momentos diferentes. De hecho, también son conocidas las historias de conductores que han vivido la situación de recibir varias multas, de golpe, por haber excedido el límite de velocidad en un radar fijo del que no eran conscientes, que se ha instalado en un tramo en su ruta diaria. Esta situación también es difícilmente recurrible, en tanto Tráfico ya ofrece suficientes garantías advirtiendo de la posición de los radares fijos con suficiente antelación, publicando el punto kilométrico en su base de datos y advirtiéndolo con la señalización en la propia carretera.
Solo cabría una posibilidad de recurrir dos multas seguidas, que sería en el caso de que hayamos recibido una sanción del mismo radar, en el mismo instante. La ley no permite que nos puedan penalizar dos veces por una única infracción.
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