El coche eléctrico ha brindado una oportunidad inimaginable a China para situarse como una potencia en el sector del automóvil en las próximas décadas, no como productor de vehículos occidentales, sino con sus propios (y prometedores) productos. Un ejemplo de ello lo tenemos en la startup Leapmotor fundada en 2015 con una producción de cerca de 50.000 unidades y que se convertirá en la primera marca en contar con un coche eléctrico con la batería integrada en el chasis o CTC de sus siglas en inglés (cell-to-chasis).
Ese coche será el Leapmotor C01, una berlina eléctrica que se sitúa como el buque insignia de la marca y que llegará al mercado este mismo año con una batería de 90 kWh, carga rápida de hasta 400 kW y hasta 700 km de autonomía según el ciclo NEDC tras seis años de desarrollo.
Las baterías CTC traen consigo numerosas ventajas respecto a las actuales
Sin embargo, lo más importante de ello es el paso que ha hado Leapmotor hacia lo que terminará siendo el futuro de la integración de la batería en el coche eléctrico. Hasta ahora, la prácticamente la totalidad de coches eléctricos que existen en el mercado tienen una batería totalmente separada de la carrocería (que recordemos, suele ser autoportante constituyendo el chasis del vehículo), mientras que con la tecnología CTC la “caja” donde se almacenan los paquetes de celdas desaparece, al igual que los propios paquetes, alojándose dichas celdas en la propia carrocería que pasa a constituir también la envolvente de las mismas.
Así pues, estamos ante un avance similar al que se dio cuando se pasó de los arcaicos chasis de largueros y travesaños (actualmente reservados a todoterrenos puros y vehículos industriales) a la carrocería autoportante y que acarrea ventajas muy similares que el propio Leapmotor C01 escenifica perfectamente.
La primera de ellas es un menor peso al eliminar esa caja (un 20 % en el C01), seguido de un mayor espacio en el habitáculo (un 14,5 % en el C01) y la posibilidad de disminuir la altura entre los bajos del coche y el suelo del interior (10 mm en el C01), lo que se traduce en la posibilidad de crear coches más bajos y menos crossoverizados, más aerodinámicos y con un centro de gravedad más bajo, además de un incremento de la rigidez torsional (un 25 % en el C01) y un menor coste de producción si tenemos en cuenta el material eliminado y la simplificación del proceso de fabricación conseguida.
Asimismo, Leapmotor asegura que integrar la batería en el chasis del vehículo no implica un mayor riesgo en caso de accidente en base a las diferentes pruebas que ellos mismos han realizado, por lo que la gran desventaja de esta innovación la tendríamos en una reparación más costosa y tediosa de la batería si fuese necesaria.
El futuro inmediato y a largo plazo de las baterías en los coches eléctricos
No obstante, a pesar de las diversas ventajas de las baterías CTC, aún no se postulan como un estándar en la industria que actualmente estaría pensando en una fórmula intermedia llamada CTP (cell-to-pack) que consiste en aprovechar los diferentes huecos de la carrocería para alojar en ellos los paquetes de celdas y que ya utilizan modelos como los Teslas Model 3 y Teslas Model Y fabricados en china con baterías producidas por CATL, empresa referente en este sector y que sitúa la segunda mitad de esta década como fecha para la introducción sus propias baterías CTC.
Aunque lo cierto es que en un futuro a largo plazo lo que realmente se pretende conseguir es elementos estructurales que también puedan ser utilizados como baterías, es decir, que la misma pieza que hace de chasis también realice la función de almacén de energía, lo que supondría una considerable rebaja en el peso del vehículo y también en los costes.
De hecho, ya se están llevando a cabo varios proyectos de investigación que apuntan a la fibra de carbono y al grafeno como materiales clave para fabricar esas celdas, aunque de momento las densidades energéticas que se están consiguiendo son unas diez veces menores a las de una batería de litio, de ahí que todavía quede un largo camino que recorrer.
Fuentes: Leapmotor | cnvpost | electricdrive | physicsworld