Los supercargadores se han convertido en una parte integral para los dueños de los coches eléctricos, les permite recorrer largas distancias sin miedo a quedarse sin carga. Sin embargo, ha habido preocupación por la durabilidad y la vida útil de las baterías de los coches, sobre todo cuando se trata de recargas rápidas frecuentes. Un estudio reciente sugiere que el uso de los supercargadores de forma frecuente no afecta a la longevidad de las baterías.
Es una gran noticia para los propietarios de Tesla y para el sector de los coches eléctricos en general. En un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Berkeley, se investigó el impacto de los supercargadores en las baterías de 12.500 coches Tesla, para ello usaron dos grupos para compararlos: un grupo con altas tasas de supercarga y otro con bajas tasas de supercarga.
Aunque no afecta la vida útil de la batería si tiene un pequeño impacto en su degradación
Los resultados fueron muy interesantes. La supercarga no afectó negativamente a la longevidad de las baterías. De hecho, las baterías de los coches con altos índices de supercarga eran ligeramente más sanas que las de los coches con bajos índices de la misma. Esto sugiere que la supercarga frecuente podría mejorar la vida útil de las baterías.
Entre las posibles razones de esto, es que la supercarga frecuente ayuda a mantener la salud de la batería al acondicionar continuamente las celdas. En otras palabras, puede ayudar a equilibrar los niveles de carga en las celdas de la batería, lo que contribuye a prolongar su vida útil. Los investigadores también descubrieron que, aunque la supercarga frecuente no afectaba a la salud de la batería, sí tenía un impacto en su degradación.
La degradación se refiere a la disminución gradual de la capacidad de una batería con el paso del tiempo. Las baterías de los coches con altos índices de supercarga presentaban índices de degradación ligeramente superiores a las de los coches con índices más bajos de sobrealimentación. Pero ciertamente la diferencia era pequeña y estadísticamente no era tan significativa. A pesar de este hallazgo, el estudio ofrece algunos consejos a los conductores de coches eléctricos que frecuentan los supercargadores.
Los investigadores recomiendan evitar el uso de los supercargadores en días donde hay altas temperaturas, ya que pueden acelerar la degradación de la batería. También sugieren que los conductores sigan los niveles de carga recomendados por Tesla y eviten cargar al 100% a menos que sea necesario. También es conveniente evitar cargar el coche en condiciones de calor extremo o frío intenso, ya que la temperatura óptima para la batería está entre 15 y 35 grados centígrados.
Por último, se recomienda alternar la carga rápida con la carga normal, que es más suave y menos agresiva para la batería. De esta forma, se puede ralentizar la degradación de la batería y alargar el tiempo en que pueda dar todo su rendimiento.
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