La conquista de los cielos a través de aeronaves eléctricas tripuladas, también conocidas como el EVTOLs, da un importante paso adelante con la alianza establecida entre Hyundai Motor Group y Rolls-Royce Aviation. Ambos fabricantes quieren tener lista una aeronave impulsado por pila de combustible de hidrógeno para 2025, buscando así producir en serie un vehículo capaz de democratizar esta nueva forma de entender la movilidad, haciéndolo además a través de una tecnología de propulsión que promete estar libre de emisiones de CO2.
De aquí a 2030 existen ambiciosos planes para que los EVTOLs inunden nuestros cielos, una carrera donde vemos cada vez más fabricantes automovilísticos implicados, pues de un modo u otro hablamos de la próxima gran revolución del transporte. Este tipo de aeronaves están llevando el planteamiento de los drones a una mayor escala, ofreciendo prestaciones cada vez mejores para poder despegar/aterrizar en casi que cualquier sitio, conseguir autonomías de varias horas de vuelo y prestaciones suficientes para acometer trayectos de corta y media distancia.
Y ante este futuro cada vez más cercano, Hyundai y Rolls-Royce han decidido unir sus fuerzas a través de un memorandum de entendimiento. El objetivo es combinar la tecnología y experiencia de Hyundai con la pila de combustible de hidrógeno, la propulsión eléctrica y el diseño de este tipo de soluciones a través de su filial Supernal, junto a la también amplia experiencia de Rolls-Royce Aviation en la fabricación y diseño de aeronaves.
El resultado de esta alianza debe ser un EVTOL capaz de estar listo para su producción en 2025, basándose además en el prototipo que Supernal acaba de presentar en el Farnborough International Airshow, que es el que os mostramos en las imágenes que acompañan esta publicación. Los planes de Hyundai en tanto a esta nueva forma de movilidad son bastante ambiciosos, pues el fabricante coreano quiere convertirse en una de las firmas líderes de este nuevo mercado. Y es que Hyundai quiere hacer uso de su propia tecnología, tecnología que además será de tipo modular permitiendo así ser adaptada a múltiples usos; de ahí la apuesta decidida por la pila de combustible de hidrógeno.