La industria del motor está detrás de la quinta parte de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero. Una cifra que no ha pasado desapercibida en la Cumbre de Clima de Glasgow (COP26), donde más de 30 países (entre los que no está España) y varios fabricantes han dado forma un nuevo pacto global para poner fin a la venta de coches contaminantes para 2035.
Como decíamos, la industria del motor es responsable del 22% de las emisiones de efecto invernadero a nivel global: el 90% de ellas proceden del tráfico por carretera. Este ha sido el punto de partida para que 31 países, 38 gobiernos subnacionales, 11 fabricantes de automóviles, y 27 propietarios de flotas y empresas de movilidad compartida firmen un acuerdo. Representan casi el 15% del mercado mundial del automóvil, es decir, una de cada cuatro ventas.
Todos aquellos que han estampado su firma en este pacto global se comprometen a que “todas las ventas de camionetas y vehículos nuevos sean cero emisiones a nivel mundial para 2040 y, a más tardar, en 2035 en los principales mercados”. A ellos se podrán unir gobiernos regionales y ciudades que se comprometen a hacer todo lo posible para que sus “flotas de automóviles y camionetas propias o alquiladas sean vehículos de cero emisiones, como tarde, en 2035″. Este acuerdo no tiene carácter vinculante porque no forma parte de las negociaciones oficiales de la ONU, pero sí refuerza la idea de que la movilidad eléctrica es el futuro.
Los grandes fabricantes ausentes
La iniciativa está liderada por Reino Unido y a ella se han unido Canadá, India, Países Bajos, Austria, Noruega, Chile y Dinamarca, entre otros. Destacan la ausencia de países como Estados Unidos, China, Alemania, Francia o España (de la que hablaremos unas líneas más abajo) porque entre ellos encontramos a algunos de los principales productores del sector.
En cuanto a las marcas, Ford, General Motors, Volvo, Mercedes-Benz, Jaguar Land Rover y BYD se han sumado a la iniciativa. Sin embargo, no les han seguido cuatro de los cinco principales fabricantes mundiales: Toyota, Volkswagen, Renault-Nissan y el grupo formado por Hyundai y Kia.
¿Y España?
España no ha rubricado el acuerdo alcanzado en la COP26 porque, tal y como han puntualizado, es algo que ya están abordando de la mano de la UE. Nuestro país, como tantos otros, tiene previsto sacar a los vehículos más contaminantes de las carreteras a través de la Ley de Cambio Climático. En ella se establece que, en 2040, las ventas sólo podrán ser de modelos con emisiones cero aunque si las instituciones europeas establecen una fecha anterior, la propuesta se modificará automáticamente.
Y es que la Unión Europea tiene previsto erradicar la producción y venta de motores de gasolina, diésel y gas a partir de 2035. Una propuesta, eso sí, que todavía tiene que cerrarse tanto con los Estados miembro como con las instituciones comunitarias.