Todos los fabricantes de cualquier producto siempre tienen en mente mejorar la tecnología de su nicho de mercado, competir por desarrollar mejores soluciones para sus clientes, y en esta ruta está Stellantis, que en colaboración con Saft, ha presentado una batería innovadora que se espera reduzca el peso y el coste de las cadenas de producción de los vehículos eléctricos. El objetivo de los socios es lanzar esta solución innovadora al mercado en 2030.
A diferencia de otras baterías avanzadas que se basan en nuevos metales, las baterías de nueva generación de Stellantis suponen una revolución interesante en electrónica. La mejora clave con respecto a la tecnología actual es la integración de tarjetas de conversión electrónica, que funcionan como inversores y cargadores de energía que están muy cerca de las celdas de iones de litio.
¿Cómo es posible esta nueva batería más ligera, pequeña y fiable?
Se trata de un avanzado sistema de control que permite a la batería generar directamente corriente alterna para el motor eléctrico. Esto sería todo un boom en la industria, ya que el hecho de que se aplique esta innovación supone la fabricación de baterías más ligeras, lo que aumentaría la autonomía del vehículo, reduciría costes, liberaría espacio y se rumora que la vida útil de la batería sea más larga.
Los coordinadores del proyecto en Francia explicaron que la integración de las funciones de inversor y cargador da lugar a una batería más eficiente, lo que aumenta la autonomía del vehículo eléctrico de batería al tiempo que lo hace más fiable y asequible. Ned Curic, Director de Ingeniería y Gestión de Stellantis, se muestra satisfecho con este revolucionario sistema de baterías y lo califica como un paso crucial en el compromiso de la empresa de proporcionar tecnología útil, fácil de usar e innovadora para todos.
Saft podrá ofrecer instalaciones llave en mano con una mayor disponibilidad de la batería, un uso optimizado de la potencia instalada y un menor espacio ocupado. La arquitectura inherente de la batería IBIS agilizará el mantenimiento y la actualización de las instalaciones, al tiempo que reducirá la huella de carbono.
Funcionamiento en el mundo real
Ambas empresas en una declaración oficial se mostraron enfocadas en la construcción de un modelo funcional del vehículo presentado recientemente. Este prototipo se someterá a distintas pruebas en los bancos de desarrollo de Stellantis, así como en carreteras y pistas públicas, todo esto con la meta de que el producto final ofrezca lo que promete.
Este nuevo sistema bautizado como IBIS es un logro importante para el sector energético y sobre todo en lo que se refiere a movilidad eléctrica, y es gracias al trabajo de 25 ingenieros y científicos de ambas empresas y del Centro Nacional de Investigación Científica Francés (CNRS). Tras cuatro largos años de investigación y desarrollo, el IBIS está listo para nuevas pruebas que perfeccionen el sistema y hallen cualquier falla que pueda presentarse.
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