Seas un neófito de la ingeniería aeroespacial o alguien con experiencia, seguro que te impresiona la creatividad y la ambición que pueden tener los estudiantes por mejorar la tecnología existente. El proyecto del club AMZ no es una excepción, ya que resalta tanto los conocimientos técnicos como el trabajo en equipo que aportan los estudiantes.
Algo que se puede destacar de este grupo de estudiantes es que desde el primer día de diseño hasta la consecución del récord mundial, del que ya os hablábamos hace unos días, todos los participantes han dedicado una increíble cantidad de tiempo, esfuerzo y energía. El coche que han creado es una obra de ingeniería, con sus líneas elegantes y su diseño innovador.
El uso de materiales ligeros y motores de buje fue esencial para lograr un nivel tan alto de rendimiento, y está claro que los estudiantes comprenden la importancia de optimizar el peso y la potencia en un coche de carreras.
¿Cómo pudieron alcanzar este hito de ir de 0 a 100 Km/h en 1 segundo?
El AMZ (Academic Motorsports Club Zurich) tiene un impresionante historial de récords de aceleración de coches eléctricos. Este es su logro más reciente, todo un récord mundial de aceleración, hacer realidad que un coche eléctrico pueda ir de 0 a 100 km/h en menos de 1 segundo, es una prueba de su experiencia técnica y su pensamiento innovador.
En concreto, su coche Mythen fue capaz de acelerar desde 0 hasta los 100 kilometros por hora en sólo 0,956 segundos, arrebatando el récord mundial al equipo de la Universidad de Stuttgart, quien ostentaba el récord hasta ahora con esa misma aceleración pero en 1,461 segundos también utilizando un coche eléctrico.
Uno de los factores clave para lograr este récord es el uso de la succión por vacío para aumentar la tracción. Esto permite al coche aplicar su potencia con mayor eficacia, lo que se traduce en una aceleración más rápida. Cuestiones como esta dejan claro la importancia de la aplicación de la aerodinámica, no sólo en el rendimiento a alta velocidad, sino también en los coches eléctricos.
Esto se debe a que, a menudo carecen de la tracción añadida de los motores de combustión interna. También es interesante que el club AMZ haya logrado un récord de este tipo en dos ocasiones anteriormente, en 2014 y 2016, lo que indica que la habilidad de sus estudiantes en este ámbito no es casualidad.
Su éxito es prueba de su dedicación y trabajo duro, que se ejemplifica en el hecho de que producen un nuevo coche de carreras cada año, lo inscriben en numerosas competiciones y son económicamente viables. Su compromiso con la excelencia y la innovación es digno de admiración, y aquí estaremos para contar qué otros hitos van consiguiendo en el futuro.
