¿Te has preguntado si los coches tradicionales tienen materiales de mejor calidad que los eléctricos? Para responder a esta interrogante la Unidad de Estudios de Transporte de la Universidad de Oxford y la Clayton School of Management de la Universidad de Monash han realizado un estudio a través de varios investigadores.
El estudio se realizó con la finalidad de hacer una comparación de la calidad de los coches eléctricos con la de los coches tradicionales de gasolina, y arrojó un resultado sorprendente y preocupante, los coches eléctricos mostraron más defectos de calidad que los coches de combustión.
Detalles a tener en cuenta que fueron revelados por este estudio
Una de las principales conclusiones del estudio es que los compradores de coches eléctricos son más propensos a detectar y notificar defectos menores, como problemas con el tableto o con la pintura. Los investigadores creen que esto se debe a varios factores, como el hecho de que los dueños de estos coches son más conscientes de sus vehículos.
Otro factor puede ser que sean influenciados por informes de los medios de comunicación que destacan los problemas que suelen producirse en coches eléctricos. Otro punto importante es que los defectos menores de los coches eléctricos suelen estar relacionados con el interior y el exterior del vehículo, mientras que los vehículos de gasolina suelen tener más problemas con los sistemas mecánicos y eléctricos.
La razón obvia de esto es que la configuración de un coche eléctrico consta de menos piezas mecánicas, lo que reduce la probabilidad de fallos mecánicos, mientras que la complejidad de sus sistemas eléctricos puede aumentar el riesgo de defectos que puedan ocasionar un daño de esa índole, por este motivo existen personas que temen que el coche en algún momento haga combustión espontánea, aunque ya se ha demostrado que las probabilidades de que un coche eléctrico se incendie son escasas.
En cuanto a la gravedad de los defectos, los investigadores descubrieron que los coches eléctricos presentan un mayor riesgo de defectos graves, la investigación arroja que estos fallos pueden ser tan graves que amerite sacar de circulación al vehículo y llevarlo al servicio de mantenimiento de coches eléctricos. Una advertencia interesante del estudio es que los investigadores descubrieron que la mayoría de los compradores de coches están satisfechos con sus vehículos, a pesar de la mayor tasa de defectos.
Esto sugiere que, aunque los coches eléctricos tengan mayor riesgo de tener problemas, sus propietarios siguen estando satisfechos con su compra.
Más información: greencarreports.com