Hemos informado en reiteradas ocasiones sobre las medidas que la Unión Europea está valorando para reducir las emisiones de CO2 de los coches de combustión interna. Por un lado, la Comisión Europea ha propuesto una excepción para que se sigan vendiendo coches que funcionen con combustible sintético después de 2035, siempre que estos combustibles sean neutros en carbono.
Por otro lado, la asociación Transport&Environment (T&E) ha indicado en un informe que estos combustibles emitirán casi cinco veces más CO2 que los coches eléctricos a lo largo de toda su vida útil. Es de suponer que la Unión Europea toma estas decisiones basándose en evidencia científica al considerar las opciones para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en nuestro continente.
Es crucial considerar no solo la contaminación directa de los coches, sino también el impacto de la producción y el transporte de los combustibles sintéticos. Además, la comunidad científica y los expertos en energía deben ser consultados y escuchados en la toma de decisiones.
¿Cuánto contaminan los coches e-fuel?
La asociación europea T&E ha calculado las emisiones totales de CO2 de los combustibles sintéticos, incluyendo todos los procesos necesarios para producir, distribuir y utilizar el combustible. Los resultados del análisis muestran que los coches de gasolina sintética emitirían 61 gramos de CO2 por kilómetro en 2035 si se aplica el criterio más débil del 70% de neutralidad de carbono.
Si se hace la comparación con los 13 gramos de CO2 por kilómetro de los coches eléctricos si se cargan con electricidad de la red eléctrica, vemos que hay una gran diferencia en pro de la descarbonización. El informe añade que la producción de e-fuels es cara y repostar gasolina sintética costaría a los conductores mucho más que mantener un coche eléctrico de batería o incluso un coche de gasolina tradicional.
La Comisión Europea ha propuesto permitir únicamente el uso de combustibles sintéticos 100% neutros en carbono en los coches nuevos a partir de 2035, y ha pedido a los Estados miembros de la UE que se pronuncien sobre esta propuesta. Se espera que los gobiernos de la UE tomen una decisión sobre estos criterios antes de finales de año.
¿Cuanto cuesta mantener anualmente un coche eléctrico en España?
El precio promedio de un coche eléctrico en España ronda los 27.000 euros, pero los precios varían considerablemente de una región a otra. Por ejemplo, los coches eléctricos son más caros en Navarra, donde un modelo de segunda mano costaría una media de 36.000 euros, mientras que en Andalucía, el precio medio de un vehículo eléctrico de segunda mano es de sólo 24.000 euros.
Otro aspecto a tener en cuenta es que los coches eléctricos suelen ser más sencillos de reparar y suponen un menor coste a la hora de darles mantenimiento. Un coche eléctrico no tiene embrague, ni aceite, ni filtros, ni correa de distribución, etc. Sin embargo, el coste de recargar un coche eléctrico en España ha aumentado una media del 28,6% en el último año.
El precio de la electricidad en nuestro país ha ido subiendo a lo largo del último año, con precios más costosos que los de países vecinos. Aunque la compra de un coche eléctrico sigue siendo más cara que la de uno de gasolina, estos en general ya son más económicos de mantener y utilizar desde hace mucho tiempo.
Además, España cuenta actualmente con el Plan Moves III, que cuenta con 800 millones de euros y que ofrece ayudas de hasta 7.000 euros para las personas que quieran comprar un coche eléctrico, pero también hay incluso subvenciones para quienes piensen en comprar una moto eléctrica.
Más información: movilidadelectrica.com