Los patinetes eléctricos son una gran solución si quieres algo más compacto que una bicicleta y además quieres adoptar el uso de vehículos eléctricos. Pero en China ahora existe un problema, la normativa sobre vehículos de micromovilidad varía en todo el mundo e incluso dentro de un mismo país, ya que cada ciudad tiene sus propias normas.
En los últimos meses algunas ciudades han prohibido el uso de patinetes eléctricos de alquiler, esto ha pasado en ciudades como por ejemplo París (Francia). Ahora, se suma China, ya que ha puesto en marcha una estricta normativa en Cantón para los Vehículos de Movilidad Personal, entre los que se incluyen los monopatines, los patinetes y las bicicletas eléctricas.
La nueva normativa de Cantón exige inspecciones para asegurarse de que estos vehículos de movilidad personal no están modificados y obliga a los conductores a bajarse del patinete al momento de cruzar el paso peatonal. Además, la normativa impone horarios y límites de velocidad específicos para el uso de este tipo de vehículos. Estas medidas se introdujeron hace unos meses en respuesta a la preocupación por la seguridad de los Vehículos de Movilidad Personal y su impacto en el tráfico peatonal.
Oportunidad para las sillas de ruedas eléctricas
Esta restrictiva normativa sobre Vehículos de Movilidad Personal en la ciudad de Cantón ha llevado a las personas a rebelarse y usar ahora las sillas de ruedas eléctricas, que no están afectadas por la normativa. Como resultado, las ventas de sillas de ruedas eléctricas han aumentado un 60% si hacemos la comparación con el mismo período del año anterior.
Y de hecho estas cuentan con precios en el mismo rango que algunos modelos de patinetes eléctricos. Incluso empresas grandes como Lenovo y Phoenix han lanzado sus propios modelos de sillas de ruedas eléctricas. Las personas consideran que es una alternativa cómoda a los patinetes eléctricos ya que no tienen que llevar casco, aunque lo recomendable es siempre usar el casco.
Además, pueden desplazarse a su destino sin necesidad de encontrar aparcamiento y simplemente tienen que plegar la silla para guardarla fácilmente. El hecho de que hayan aumentado las ventas de las sillas de ruedas eléctricas pone de manifiesto la capacidad de adaptación de las personas ante los cambios de la normativa y la demanda de soluciones de movilidad innovadoras.
Queda por ver si otras ciudades seguirán el ejemplo de Cantón en la regulación de este tipo de vehículos o si incluso añaden las sillas de ruedas eléctricas con alguna clausula o asterisco. En general, la regulación de los vehículos de micro-movilidad es una cuestión compleja y en evolución, con diferentes enfoques adoptados en diferentes partes del mundo.
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