Conseguir que un coche eléctrico alcance una autonomía superior a los 1.200 kilómetros. Ese es el reto que ha afrontado la compañía Our Next Energy (ONE) y el objetivo que persiguen desde su fundación en 2020.
Conseguir el desarrollo de sistemas de baterías que alcancen una autonomía de 1.200 kilómetros en un coche eléctrico es, sin duda, un reto mayúsculo, y aún mayor alcanzar una producción a una escala industrial y viable en un turismo. Pero la compañía de Michigan está convencida de conseguirlo. Y no solo eso, ha conseguido convencer a fabricantes como BMW, que en octubre anunciaba su inversión en el proyecto de Our Next Energy para producir a escala industrial sus sistemas de baterías y utilizarlos en productos entre los que, quién sabe, podrían estar los propios coches eléctricos de BMW.
Ahora bien, ¿en qué consiste la tecnología de baterías que promueve Our Next Energy?
El paradigma de la batería híbrida para coches eléctricos
No es la primera vez que hablamos del concepto de batería híbrida. Hasta ahora, estamos acostumbrados a que un coche eléctrico, o un híbrido enchufable, esté dotado de un sistema de baterías con celdas que han sido diseñadas y construidas empleando la misma tecnología. Sus prestaciones, su capacidad de carga y densidad energética, su autonomía, o su potencia de carga, estarán naturalmente limitadas y necesariamente conectadas a la tecnología de las celdas.
El concepto de batería híbrida propone una solución alternativa. El empleo de un sistema de baterías con celdas que combinen varias tecnologías permitiría, entre otras cosas, disponer de las prestaciones que se requieren en función de las circunstancias. Por ejemplo, un fabricante de coches eléctricos podría desear que su producto disponga de una batería económica, fiable, y muy compacta, que será la que recarguemos a diario para trayectos que en el día a día no deberían superar los 100 kilómetros. Y, por otro lado, disponer de baterías con mayor densidad energética, con tecnologías más avanzadas, que permitan recorrer más de 1.000 kilómetros y poder realizar un viaje sin tener que parar a recargar.
En la industria ya se han avanzado detalles de otras tecnologías muy interesantes, como las baterías híbridas que propone CATL, que emplearía celdas de iones de litio, en conjunción con celdas de iones de sodio, para conseguir vehículos eléctricos fiables incluso en las peores condiciones.
La solución de Our Next Energy es la de ofrecer una batería de uso intensivo y lo que la propia empresa denomina como un extensor de autonomía, que no es otra cosa que una batería con una tecnología de almacenamiento diferente y mayor densidad energética. La primera batería, Aries, podría cubrir holgadamente las necesidades diarias, ofreciendo una autonomía próxima a los 250 kilómetros y la tecnología fiable y económica de que ya disponen las baterías actuales. La segunda batería, denominada Gemini, gozaría de una tecnología de almacenamiento energético que dotaría al automóvil de la energía restante para cubrir distancias de hasta 1.200 kilómetros sin parar a recargar.
El hecho de que marcas como BMW hayan invertido en el proyecto Our Next Energy es, sin duda, un aval para su proyecto. No obstante, deberíamos preguntarnos si el coche eléctrico necesita, realmente, autonomías que superan con creces la de la mayoría – por no decir todos – de los turismos de combustión interna disponibles en el mercado. El futuro del coche eléctrico debería pasar por el empleo de baterías más ligeras y económicas y no soluciones más complejas y costosas que resuelvan un problema que no existe. ¿Quién recorre más de 1.000 kilómetros sin parar, al menos, a descansar, el tiempo suficiente para recargar las baterías?
Pero el proyecto de Our Next Energy no se dirige únicamente a turismos, en los que esta tecnología podría aplicarse adecuándose a los requisitos de un coche eléctrico para el público general. El sistema de baterías Aries-Gemini se ha concebido sobre todo para el transporte. Y es que conseguir que un camión disponga de una autonomía de 1.200 kilómetros sí puede marcar la diferencia, en tanto permitiría realizar transportes en rutas de larga distancia sin tener que recargar las baterías en otro lugar que no sea el punto de recogida, y el punto de entrega.