La carga y la red de recarga sigue siendo uno de las características de los coches eléctricos que más reticencias genera a los conductores. Sin embargo, conectar el vehículo a una estación podría ser historia en el futuro gracias a la carga dinámica. Estas infraestructuras generarían un flujo constante de electricidad que terminaría con las baterías de gran capacidad y con la dependencia de la red de recarga. Puede parecer algo muy lejano, pero las carreteras con recarga en movimiento ya existen: Stellantis tiene una.
No hace mucho, el Grupo Stellantis inauguró en Italia un laboratorio bautizado como la ‘Arena del Futuro’. Este banco de pruebas se ha llevado a cabo con la colaboración de socios internacionales, instituciones públicas y universidades: se trata de un circuito de conducción equipado con un sistema de carga inductiva inalámbrica. Está ubicado junto a la Autopista A35, que une Milán con Brescia.
Dynamic Wireless Power Transfer (DWPT)
Este paso supone el inicio de la tercera fase del proyecto: un trazado de 1,05 kilómetros que funciona con 1 MW de potencia. A simple vista parece una carretera normal, pero bajo el asfalto hay un sistema equipado con la tecnología Dynamic Wireless Power Transfer (DWPT) que permite la recarga de los vehículos de baterías cuando estos circulan por esta vía electrificada. De esta forma, la ansiedad por el alcance de la autonomía desaparece… al menos en estos tramos.
¿Cómo funciona? La calzada tiene un sistema de bobinas de cobre que crea un campo magnético cuando la corriente eléctrica pasa por ellas. El coche, por su parte, tiene otra bobina situada en la parte baja de su estructura que genera una corriente eléctrica con la que alimenta la batería y también la recarga. El punto fuerte de esto es que se puede incorporar a cualquier modelo siempre que cuente con el sistema necesario.
Fiat 500 e Iveco E-Way
Por la ‘Arena del Futuro’ ha pasado un Fiat 500 y un autobús Iveco E-Way. Tras acumular bastantes kilómetros, Anne-Lise Richard, responsable de movilidad eléctrica en Stellantis, asegura que los resultados son alentadores: “Esta solución proporciona una solución concreta a los problemas de autonomía y carga que tanto preocupan a los clientes. La carga de los vehículos mientras están en movimiento ofrece claras ventajas en términos de tiempos y tamaños de las baterías”.
Ahora el objetivo pasa por utilizar este circuito como si fuera una carretera real optimizando el asfaltado para garantizar que sea lo más duradero posible sin limitar la eficacia y la eficiencia de la carga inductiva.