Con la prohibición de vender coches con motores de combustión interna a partir de 2035 el futuro a medio de la industria del automóvil en Europa es claramente eléctrico, por lo que las diferentes marcas están tomando posiciones cada vez más rápido. Una de ellas es Mercedes-Benz, que en su último movimiento recientemente anunciado se ha aliado con un gran rival como Stellantis con el objetivo de asegurar el suministro de baterías en el continente europeo.
Así pues, los alemanes se han hecho con un estratégico 33 % de ACC (Automotive Cells Company), ocupando así dos de los seis puestos del Consejo de Supervisión de ACC junto a Stellantis y Total Energies como accionistas iguales, lo que implicará un aumento de la capacidad industrial de la compañía hasta, al menos, 120 GWh para el año 2030.
Recordemos que la misión principal de ACC es la de desarrollar y fabricar celdas de baterías y módulos para vehículos eléctricos en Europa con el apoyo de las autoridades francesas, alemanas y europeas, para lo que se estima que será necesario una inversión total de unos 7.000 millones de euros.
Con esta inversión Mercedes se «asegura» el suministro de baterías en Europa
Con ello se pretende convertir a Europa en uno de los principales polos del vehículo eléctrico a nivel mundial, pero sobre todo, reducir la dependencia de otros mercados como el asiático para evitar posibles futuras crisis en el abastecimiento como la que ya estamos viviendo con los semiconductores o incluso el acero.
Justo en esa línea se pronunciaba Ola Kallenius, CEO de Daimler, en el anuncio del acuerdo: «Esta nueva asociación nos permite asegurar el suministro, aprovechar las economías de escala y brindar a nuestros clientes una tecnología de baterías superior. Además de eso, podemos ayudar a garantizar que Europa permanezca en el corazón de la industria automotriz, incluso en la era eléctrica.»
Por lo tanto, podemos decir que cuando en Mercedes dijeron que estaban preparados para sólo vender coches eléctricos en 2030 si así lo demandaba el mercado era totalmente cierto, tanto por la amplia gama EQ que están construyendo a pasos agigantados con unas últimas incorporaciones como el EQE o el primer AMG totalmente eléctrico de la mano del Mercedes-AMG EQS 53 con más de 760 CV, así como por asegurarse el suministro de baterías.
Por su parte, Carlos Taveres, CEO de Stellantis, se ha limitado a dar la bienvenida a los de Stuttgart, además de recordar la fuerte apuesta por la electrificación el grupo franco-italiano, algo que se deja ver en decisiones como la de que Opel sólo venderá coches eléctricos en 2028.