La energía eólica marina es un gran recurso para conseguir energía limpia y renovable. Esto es porque en el mar la velocidad del viento es mucho mayor, lo que permite producir más energía. El problema de este tipo de energía es que es cara, y eso hace que no sea tan fácil implantarla, pero este nuevo aerogenerador podría ser la solución.
Un aerogenerador sin torre y sin palas
Puede que nunca hayas visto un aerogenerador marino, pero básicamente es igual que uno terrestre, más grande, situado en una plataforma flotante. Sin embargo, el diseño, llamado ARCUS, del Laboratorio Nacional de Sandia es totalmente diferente a los aerogeneradores que hoy en día conocemos.
Este molino no tendrá torre y tampoco palas. Bueno, sí que tendrá palas pero no serán como las que tienen ahora. Son dos palas verticales curvas que se despliegan a partir de un eje vertical al cual rodean. Se asemeja mucho a las varillas de una batidora. Este diseño sin torre aporta muchas ventajas a la eólica marina.
¿Por qué un aerogenerador sin torre?
Este proyecto tiene la finalidad de reducir los costes del aerogenerador. Los aerogeneradores marinos actuales destinan un 80% del coste a los sistemas necesarios para hacer viable una plataforma flotante y el otro 20% a la turbina en sí. La cosa es que, si se simplifica la turbina, no se necesitará una plataforma flotante tan compleja.
Los aerogeneradores convencionales son muy altos para que las palas no toquen el suelo, en cambio, el aerogenerador Arcus no necesita ser tan alto ya que las palas en ningún caso barrerán el suelo. El tren motriz también se puede ubicar en la plataforma flotante. De esta forma se consigue más estabilidad sin necesidad de una plataforma con sistemas muy complejos de sujeción.
Por otro lado, hay un nuevo tipo de plataformas en la industria del petróleo y el gas que tienen una masa menor y que pueden ser ideales para el aerogenerador Arcus, lo que permitiría reducir mucho los costes.
¿Por qué es importante reducir los costes de los aerogeneradores marinos?
Si conseguimos reducir los costes de los molinos marinos, podremos implantar muchos más y eso haría crecer la energía eólica marina. Y eso es justo lo que necesitamos porque, si conseguimos producir más energía renovable, podremos dejar de utilizar la energía que proviene de combustibles fósiles, y eso contribuirá a reducir las emisiones de gases con efecto invernadero.
Actualmente se estima que el coste de las turbinas eólicas marinas es de 113 dólares por megavatio y el de las turbinas convencionales de nos 78 dólares por megavatio. En el caso del proyecto Arcus, los investigadores aseguran que el coste es de 55 dólares por megavatio, lo que hace que sea más barato, no solo que los aerogeneradores marinos, si no que también que los terrestres.
Eso permitiría a más países instalar estos aerogeneradores, y es que, además de ser baratos, el sistema para poder implantarlos sería menos complejo. Habrá que esperar para ver si el proyecto finalmente ve la luz, pero de ser así, será un avance enorme en la energía eólica marina.
