ESPACIOS
ENERGÍA Y SOSTENIBILIDAD
Cerrar CERRAR
Sostenibilidad

3 MIN

¿Y si la salvación del diésel y la gasolina fuera un combustible neutro en carbono que también limpia el aire?

La industria del motor no ha renunciado a los motores convencionales y el mejor ejemplo de ello son las marcas que, como Porsche, se han lanzado de lleno a investigar con carburantes sintéticos para encontrar la forma de dar perpetuidad a este tipo de propulsores. Ahora es Carbon Engineering la compañía que propone una fórmula que mejoraría la de los alemanes: ¿y si la salvación del diésel y la gasolina fuera un combustible neutro en carbono que también limpia el aire?

Carbon Engineering es una empresa, con sede en Canadá, que afirma que es capaz de producir un combustible limpio que, además, también depurará el aire que nos rodea. Suena a panacea para el coche privado, pero parece que su tecnología es sólida. Ha estado trabajando en ella desde 2015 y afirma que, actualmente, está dando forma a una serie de plantas en las que se podría capturar un millón de toneladas de dióxido de carbono (CO2) al año para fabricar combustible alternativo.

Inconvenientes Combustibles Sinteticos Gasolina Aditivo Laboratorio

¿Cómo funcionaría?

La pregunta es inevitable. El proceso propuesto por Carbon Engineering arrancaría con esa captura directa del dióxido de carbono presente en el aire. Por otro lado y con electricidad limpia se llevaría a cabo el proceso de electrólisis en el que se separa el hidrógeno del oxígeno. Con los elementos disponibles, se llevaría a cabo la reacción entre el CO2 y el hidrógeno: el resultado son unos hidrocarburos que dan lugar al combustible sintético. De esta manera, produce carburante sin emisiones de carbono y, al mismo tiempo, limpia el aire que respiramos.

Carbon Engineering añade, además, que su fórmula puede aprovechar la infraestructura existente como también proponer Porsche con su e-fuel. Eso significaría que para utilizar este combustible ecológico sería preciso un esfuerzo muy pequeño con el que se adaptarían tanto las redes de distribución como los vehículos.

Mejoras en el rendimiento

Estos combustibles no solo podrían ser más limpios, sino que también podrían mejorar el rendimiento de los motores. Algo con lo que Lotus ya experimentó en 2008 con el Lotus Exige270 Trifuel, que podía usar hasta de tres combustibles diferentes: gasolina tradicional, etanol y metanol. Estos dos últimos pueden lograr que aumente el rendimiento del coche como pasaba con el deportivo británico cuya potencia se incrementaba de 240 a 270 CV.

De ser así, eliminaría cualquier reticencia sobre los combustibles sintéticos y apostar por ellos para hacer funcionar los coches de combustión dibujaría un escenario cargado de beneficios para todos.

Dame tu opinión sobre este artículo

Ni fu, ni fa
Me ha gustado
¡Muy bueno!

Elena Sanz Bartolomé

Seguir leyendo...

Cargando...