En Alemania se ha inaugurado un techo de paneles solares para carriles bici, una primicia en esta nación. La instalación, de 287 kW, está situada en Friburgo, al sur del país, y alberga 900 módulos solares de vidrio translúcido suministrados por el fabricante alemán de paneles Solarwatt.
Energía fotovoltaica en carril bici
Estos módulos solares también pueden instalarse sin controles individuales ni medidas de seguridad adicionales, por lo que son adecuados para instalaciones aéreas y en fachadas. Este proyecto demuestra cómo las fuentes de energía renovables pueden integrarse en la infraestructura de transporte y contribuye al objetivo del país de disminuir la dependencia de los combustibles fósiles y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
El campo solar de 300 metros de largo se inauguró en un carril bici. La instalación, situada cerca de un estadio de fútbol, generará 280 MWh de energía al año y es fruto de la colaboración entre distintas empresas, entre ellas Badenova, el Instituto Fraunhofer de Sistemas de Energía Solar ISE y la ciudad de Friburgo. La energía generada por el campo solar se utilizará principalmente en el laboratorio y el edificio del Fraunhofer ISE, que es el arrendatario y operador de la instalación.
Compromiso de Alemania con las energías renovables
Detlef Neuhaus, Consejero Delegado de Solarwatt, afirma que la rápida expansión de la energía solar en Alemania es fundamental para alcanzar los objetivos climáticos y reducir la dependencia de los combustibles fósiles. Se muestra orgulloso de haber contribuido a un innovador proyecto piloto de paneles solares en carriles bici.
Por su parte, Heinz-Werner Hölscher, Consejero Delegado de Badenova, señala que los espacios urbanos pueden reutilizarse con eficacia para un doble propósito: Que los ciclistas disfruten de un desplazamiento seguro y, al mismo tiempo, se genere electricidad. Hölscher subraya la importancia de adoptar este tipo de soluciones, ya que resuelven problemas medioambientales urgentes, al tiempo que mejoran la vida urbana.
Por un futuro sostenible
La instalación del primer carril bici solar de Alemania demuestra la importancia de la energía fotovoltaica en el mundo actual. El proyecto no solo contribuye al objetivo del país de reducir su dependencia de los combustibles fósiles y alcanzar sus objetivos climáticos, sino que también sirve de modelo para integrar fuentes de energía renovables en las infraestructuras urbanas.
Este proyecto piloto funciona como prueba de concepto, mostrando cómo los paneles solares pueden integrarse en espacios existentes sin afectar negativamente a su función principal. Al aprovechar la superficie no utilizada, la instalación del carril bici presenta una forma creativa y eficiente de generar energía, al tiempo que proporciona una ruta segura y cómoda para los ciclistas.
Esta innovación destaca los beneficios potenciales del aprovechamiento de las energías renovables y sirve de recordatorio de la urgente necesidad de abandonar los combustibles fósiles, en aras de la sostenibilidad y la estabilidad medioambiental.
