Lo más típico que puedes ver en cualquier película estadounidense de los 90 son los autobuses escolares de color amarillo que llevan a los niños a la escuela, ese diseño icónico sigue teniendo vigencia a pesar de los años. Pero lo normal es que si quiere seguir estando, tendrá que evolucionar hacia un sistema eléctrico, ya que la gran mayoría de los autobuses escolares de EE.UU. son diésel.
Con su sistema actual tiene una emisión de 1,5 kg de dióxido de carbono por cada kilómetro y medio, esto supone más del doble de lo que genera un vehículo alimentado por electricidad, esto lo asegura el Laboratorio Nacional de Argonne. Si se logra convertir esta flota de autobuses escolares (como se quiere hacer en el Reino Unido con los vehículos militares) en eléctricos, supondría un gran recorte en la emisión de dióxido de carbono.
La salud y el ambiente las razones del cambio
Almeta Cooper, quien es la gerente nacional de equidad en salud de un grupo ambientalista en un grupo llamado Moms Clean Air Force declara que este es un tema de salud y debería importar a todos. Y es que el diesel es un agente que puede causar cáncer, los componentes específicos como las partículas y los óxidos de nitrógeno se les relaciona con el asma y más problemas respiratorios.
Por este motivo Cooper y otros activistas tienen mucho tiempo proponiendo el cambio de la flota de autobuses escolares por unos eléctricos, y ahora que actualmente estos vehículos han ganado cuota de mercado parece ser el momento. En 2016 sólo habían 10 autobuses escolares eléctricos, este número se ha visto incrementado y para diciembre de 2022 son 5.612. La autonomía de estos autobuses eléctricos suele rondar los 160 kilómetros, con lo cual pueden cubrir la ruta designada para llevar a los niños a sus escuelas, también hay puntos de carga en la ruta por si algo falla.
La transición al vehículo eléctrico se está acelerando
En Estados Unidos, la EPA financió el cambio de 53 autobuses diésel por sus contrapartes eléctricas entre 2019 y 2021. Karl Simon quien es Director de la División de Transporte de la y Clima de la EPA dice que obtuvieron 4 mil millones de dólares en solicitudes el año pasado cuando lanzaron el reembolso para una oferta de 500 millones.
Asegura que su división ha entregado 900 millones de dólares para que ese dinero sea invertido en autobuses escolares eléctricos en lugar de los tradicionales de diésel. La EPA tiene pensado invertir mil millones de dólares al año para reemplazar estos vehículos hasta que se acabe el dinero que han logrado recaudar, es una iniciativa interesante que podría tener éxito en otras latitudes.
