El cambio climático es un hecho, podemos ver cientos de ejemplos de lugares que históricamente eran frescos y actualmente presentan las temperaturas más altas de su historia, pero es que también ocurre a la inversa, lugares cálidos ahora presentan temperaturas extremadamente bajas. En España estamos viendo el primer caso, apenas estamos en Abril pero ya estamos viendo temperaturas de 37° en diferentes comunidades autónomas de la geografía española.
Teniendo esto en mente, debemos pensar en que el coste de reducir la huella de carbono es menor al que supondría hacer algo cuando ya todo esté perdido, viendo una película muy famosa llamada El Día de Mañana (2004), un escenario como ese nos parecería imposible de ver, pero pensemos que este planeta que actualmente alberga casi 8 mil millones de personas, alguna vez ya pasó por una era de hielo, un contexto inverso a ese se podría dar si las condiciones se llegan a cristalizar.
España y su compromiso con el medio ambiente y la vida
Nuestro país se está alzando como la nación que más población que está de acuerdo con emprender acciones que tengan como meta revertir la situación que se está dando desde hace décadas por acción del hombre. Es cierto que la inversión puede ser muy costosa, pero, ¿No es mejor tener un planeta en el que puedan vivir tranquilas las generaciones futuras? Y eso solo será posible si tienen un planeta limpio en el que el cambio climático no suponga un riesgo para sus vidas.
En España el 45% de las personas encuestadas piensan que este coste es asumible pensando en los beneficios que se generarán en cuanto a una mejor calidad de vida, por otro lado están un 27% que piensan que emprender acciones que frenen el cambio climático suponen un costo inasumible para la humanidad, entiéndase por humanidad a los gobiernos del mundo y las diferentes empresas que podrían colaborar en esta meta.
La pandemia ha tenido un costo muy alto, no solo en las millones de vidas que se perdieron, sino también en el coste económico para todos los gobiernos y, por supuesto, para los ciudadanos, quienes en muchos casos perdieron sus empleos, familiares y la estabilidad con la que contaban, otra de las consecuencias de esta pandemia ha sido el de la subida inflacionaria, que provoca que cada vez estemos menos preocupados por el medio ambiente y en cambio lo estemos más en qué vamos a llevar a la mesa.
Aunque el contexto económico actual no es el más idóneo, si existe una parte de la sociedad mundial que está comprometida en hacer todo lo posible para reducir la huella de carbono, y España es prueba de ello, queremos un mundo más limpio, con energías renovables, que tengan cada vez menor incidencia en el medio ambiente y no supongan una limitación en nuestra calidad de vida.
En España el 31% de las personas encuestadas estaría de acuerdo en una suba de los impuestos motivada por una lucha contra el cambio climático, Reino Unido también está en esas cifras en cuanto a un aumento de impuestos por ese motivo. España además es el país de Europa que menos población está en desacuerdo con esta medida (35%), con lo cual nos muestra que un porcentaje importante está por la labor de hacer algo.
