La Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica, en su objetivo por reducir el nivel de emisiones contaminantes e impulsar modelos de energías alternativas como los coches eléctricos, ha puesto en el punto de mira a los modelos más contaminantes. Y es que antes de ver cómo los prohíben, estarán obligados a pagar más tasas que el resto: así son los impuestos verdes de Valencia y Cataluña.
Tal y como informa El Economista, la Comunidad Valenciana ha diseñado tres nuevos impuestos autonómicos. El primero de ellos se aplicará a las emisiones de gases de efecto invernadero (dióxido de carbono y metano) procedentes de instalaciones productivas: tendrán que pagar 200 euros por cada kilotonelada de emisiones de CO2 equivalente emitida. El segundo irá destinado a las grandes superficies con más de 2.500 metros cuadrados comerciales debido al tráfico rodado y a las necesidades de transporte que generan: dependiendo de varios factores se establecerán las tasas.
A partir de 2025
El tercero será el que tendrá mayor impacto porque en su objetivo están los vehículos de tracción mecánica: coches, motos y furgonetas cuya capacidad de transporte sea inferior a 3,5 toneladas. Dependiendo de sus emisiones de dióxido de carbono, los coches y las motos pagarán entre 70 céntimos y 1,40 euros por cada gramo; las furgonetas deberán abonar 70 céntimos. ¿Habrá excepciones? Sí, los coches y motos que estén por debajo de los 95 g/km y las furgonetas de menos de 140 gramos.
Estos tres impuestos ya han recibido luz verde por parte del Consell presidido por Ximo Puig. Su siguiente parada será el parlamento autonómico valenciano, donde se procederá a su tramitación. Si todo va según lo previsto, la tasa para los coches más contaminantes entrará en vigor en 2025.
Cataluña, la pionera
Será una tasa semejante al que Cataluña empezó a aplicar en 2021: impuesto sobre las emisiones de dióxido de carbono de los vehículos de tracción mecánica. Fue aprobado en 2019, entró en vigor un par de años después y según la Patronal Catalana de la Distribución de Automoción (Fecavem), la horquilla de precios va desde los 3 hasta los 300 euros. No en vano, las previsiones apuntan a una recaudación, aproximada, de 66 millones de euros.
El parque automovilístico de Cataluña está formado por 2,2 millones de vehículos y la tasa se aplicará a los turismos (hasta 9 plazas), motos y vehículos comerciales hasta 3,5 toneladas cuyas emisiones superen los 120 g/km o los 160 en el caso de las furgonetas. Eso sí, los coches oficiales, los clásicos, los históricos, los adaptados para Personas con Movilidad Reducida (PMR), los ciclomotores y las ambulancias estarán exentos.