¿Sabías que estamos rodeados de neumáticos? Aunque no lo veamos, nuestro mundo está fabricado con neumáticos reciclados. Todos los neumáticos tienen una segunda vida. Tras su reciclaje, los materiales empleados en el neumático, convenientemente tratados, se utilizan para construir carreteras, campos de fútbol de césped artificial o, incluso, para crear otros neumáticos.
Teniendo en cuenta que el neumático es un elemento clave para la movilidad y que esta es imprescindible para la vida que conocemos y las futuras generaciones, «Michelin tiene desde sus comienzos el principio claro del cuidado del planeta, el objetivo es ofrecer a todos una mejor forma de avanzar, y esto significa buscar un Michelin Todo Sostenible», según Florent Mengaux, presidente del Grupo Michelin, «el Desarrollo Sostenible es aquel capaz de satisfacer las necesidades actuales sin comprometer los recursos y posibilidades de las generaciones futuras».
La sostenibilidad de un elemento imprescindible de un automóvil, como es el neumático, ha de tener muy presente todo el proceso, empezando por su producción, su vida útil y posteriormente su tratamiento cuando expira su vida útil.
A continuación veremos algunas de las claves al respecto de las infinitas vidas de un neumático.
Las infinitas vidas de un neumático
Todos los neumáticos tienen una segunda vida. Michelin se unió junto a otros fabricantes en 2005 para establecer SIGNUS, una entidad sin ánimo de lucro que surgió para garantizar la gestión medioambiental del neumático al final de su vida útil. Trabajan junto con los talleres instaladores y las administraciones públicas para garantizar la recogida del neumático y su tratamiento. Del tratamiento del neumático, surgen diferentes productos específicos que se emplean en múltiples aplicaciones.
El Elastire es un granulado o polvo de caucho, elástico, aislante y resistente que, por sus propiedades, se utiliza para rellenos de césped artificial y zonas de recreo, para aplicaciones industriales como elementos de seguridad vial e incluso para obra civil e infraestructuras, por ejemplo para formar mezclas bituminosas que se emplean para el asfaltado de carreteras.
El Geotire es un material triturado, ligero, duradero y muy permeable, lo que contribuye que se utilice en construcciones y obra civil, por ejemplo para materiales de drenaje o muros de contención.
Reducir la huella de carbono de un neumático desde su producción
Los productos que resultan del tratamiento de neumáticos que han vencido también se emplean en la producción de nuevos neumáticos. Y no solo eso. Los neumáticos también se producen empleando otros productos reciclados. Hugo Ureta, Director de Comunicación Corporativa Michelin España y Portugal, nos contaba los objetivos de Michelin para las próximas décadas, apuntando que «para 2030 el 40% de las materias primas empleadas por Michelin serán de origen vegetal o sostenible y para 2050 el 100% serán de origen renovable, vegetal o sostenible». Michelin produce sus neumáticos empleando, por ejemplo, estireno conseguido del reciclaje de vasos de yogur o poliéster del reciclaje de botellas de plástico.
También es especialmente importante el empleo de materiales naturales y de origen sostenible. Michelin emplea resinas de pino, con una alta disponibilidad cerca de su fábrica de Valladolid; caucho sintético obtenido de biomasa, que sustituye a los cauchos procedentes del petróleo; e incluso aceite de girasol, en sustitución de aceites sintéticos. En cualquier caso, la principal materia prima que se sigue requiriendo para producir un neumático es el caucho natural.
Hugo Ureta nos contaba también que «Michelin se ha comprometido a reducir en 2030 el 50% las emisiones de CO2 en el proceso productivo y que en 2050 todas las fábricas sean neutras en carbono». De manera que la búsqueda de la eficiencia en el proceso de producción y el empleo de energías renovables es también esencial para alcanzar estos objetivos.
