Una de las claves para el futuro de los coches eléctricos reside el reciclaje de las baterías y recuperación del litio. Es un proceso complejo y difícil y resolverlo sería uno de los grandes pasos adelante para los coches eléctricos. Pues bien, una de las últimas propuestas llega desde Escocia, donde unos investigadores están reciclando las baterías del Nissan Leaf con unas bacterias cuyo excremento es litio.
Biotecnología para reciclar baterías
El reciclaje de las baterías es importantísimo porque obtener el litio en la Tierra no es fácil. Implica gastos económicos y humanos muy grandes. Y por supuesto, no es especialmente sostenible. Por otro lado, el litio de las baterías no se gasta, por lo que puede recuperarse. Si se encontrara la forma de recuperar este de manera barata, el mundo de los coches eléctricos tendría el futuro asegurado.
Investigadores de la Universidad de Edimburgo están haciendo pruebas con unas bacterias sometidas a un proceso de bioingeniería, que podrían resolver el problema de la recuperación de los metales de las baterías.
Bacterias que excremento es litio
Podríamos decirlo de otra forma, pero lo cierto es que el papel de las bacterias en todo esto es, precisamente, que tras consumir la batería, su excremento son los metales de la misma.
Y aunque el litio es el principal elemento a tener en cuenta debido a que es clave en cualquier batería, también hay otros metales importantes como el cobalto, el manganeso o el níquel, que se recuperan por medio de este proceso.
Antes de todo esto, la batería es convertida en una especie de amalgama líquida deshecha que es de la que se alimenta dicha bacteria.
Una bacteria desarrollada para consumir baterías
Aunque no se puede decir que la bacteria haya sido desarrollada desde cero, pues ha sido seleccionada con especial cuidado en función de sus características de vida, sí que es verdad que esta ha sido sometida a un proceso de ingeniería para potenciar algunas de sus capacidades.
Según afirma el equipo de desarrollo, todo el proceso se produce dentro de un bioreactor. No queda muy claro a qué se refieren con eso de bioreactor, pero en realidad parece más una especie de contenedor con las condiciones de temperatura, presión y humedad ideales, donde se libera la bacteria la bacteria para que consuma la amalgama de baterías.
El objetivo es encontrar una forma de procesar y reciclar baterías de forma masiva para recuperar los elementos valiosos que estas contienen al finalizar el ciclo de vida, para reutilizarlos en nuevas baterías.