En Málaga se están realizando importantes estudios de viabilidad para explorar la posibilidad de producir hidrógeno renovable a partir de las estaciones depuradoras de aguas residuales de las Estaciones de Depuración de Aguas Residuales. Esto, por parte de la empresa Conacon Sando, en conjunto con la Corporación Tecnológica de Andalucía, la Universidad de Málaga y Sando Agua.
El objetivo es convertir las EDAR en biofábricas que generen energía renovable para otros sectores. De ser factible, estamos hablando de un proyecto que contribuirá tanto a la eficiencia energética como a la economía circular, al aprovechar residuos de otras actividades.
Aprovechando al máximo los recursos para la producción de combustibles limpios
Este proyecto busca optimizar los procesos de generación de biogás a partir de lodos de depuradora y su enriquecimiento con hidrógeno renovable procedente de la electrólisis fotovoltaica. Esto, con el fin de provocar un aumento significativo de la producción de biocombustibles gaseosos de alto valor energético.
El estudio de viabilidad se encargará de evaluar la capacidad del biogás para producir biometano y, mediante el uso de oxígeno renovable obtenido por electrólisis, su potencial para la producción de hidrógeno verde. Del mismo modo, un futuro proyecto de investigación asociado a este estudio analizará la viabilidad de utilizar biometano e hidrógeno renovable como vectores energéticos o materias primas.
En la búsqueda de la economía circular con la producción de hidrógeno a partir de residuos
Este ambicioso proyecto pretende transformar una EDAR en una biofábrica capaz de afrontar los retos de una economía circular mediante la gestión de residuos de otras industrias (en particular la agroalimentaria). El proceso es autosuficiente y energéticamente eficiente, lo que lo convierte en una fuente fiable de energía renovable.
El director técnico del sector de Edificación y Obra Civil de CTA, Carlos García, ve en este proyecto un cambio de paradigma en la forma de ver y gestionar las EDAR. En lugar de dedicarse únicamente al tratamiento de vertidos, se convertirán en centros de producción y distribución de energías renovables.
Además de los beneficios medioambientales y económicos de este proyecto, también ofrece oportunidades para avances científicos y tecnológicos en el campo de la producción y el almacenamiento de hidrógeno. Esto conduce al desarrollo de tecnologías más eficientes y rentables, que pueden aplicarse a otras industrias. En conjunto, los beneficios potenciales de este proyecto de conversión de aguas residuales en hidrógeno limpio demuestran que tiene el potencial de ofrecer un impulso al desarrollo económico de forma sostenible.
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