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Los accidentes con animales, entre ellos los considerados cinegéticos, son más comunes de lo que puede parecer, sobre todo en las comunidades de Galicia, Castilla y León, Aragón y Cataluña, donde se registra el mayor número. De hecho, según indica la propia DGT, en 2017 se produjeron más de 20 mil accidentes, de los cuales, 363 con víctimas (2 muertos y 28 heridos hospitalizados). Así pues, es fundamental que conozcas cómo actuar si te cruzas con un animal en la calzada, y en caso de que finalmente lo atropelles, saber cuál es tu grado de responsabilidad.
Cómo actuar si hay un animal en la calzada
En primer lugar conviene extremar las precauciones en situaciones en las que es más probable que nos encontramos con un animal en medio de la carretera. Atendiendo a la estadística, el 80 % de accidentes de este tipo tuvo lugar en carreteras convencionales, y además, en épocas de invierno, y sobre todo de noche, suelen deambular cerca de la carretera en busca de alimento. Asimismo, nunca uses el claxon para ahuyentarlos, y si es de noche utiliza las luces cortas. Igualmente, ten presente que aunque solo puedas ver un animal, a pesar de que no esté invadiendo la vía, es muy probable que hayan otros cerca.
En una encuesta llevado a cabo por el RACE a 1.300 conductores que sufrieron un accidente de este tipo, el 73 % de ellos realizó un frenada de emergencia, el 50 % dio un volantazo para esquivarlo y el último 24 % llegó a invadir el sentido contrario. Jorge Castellanos, jefe de Seguridad Vial Institucional del RACE, indica que lo correcto ante estas situaciones es «intentar no dar un volantazo, mantenerse en el carril sin hacer movimientos bruscos y frenar a fondo para llegar al impacto a la menor velocidad posible», ya que dar un volantazo o invadir el carril contrario podría provocar el vuelco del vehículo o una colisión frontal con otro coche.
He tenido un accidente cinegético: ¿qué hago?
Si por desgracia no has podido evitar el accidente, lo primero que debes hacer es inmovilizar el coche correctamente en una zona segura y utilizar los triángulos de emergencia para advertir a los demás conductores. Acto seguido, llama al 112 y comunica lo sucedido, y a continuación «presta primeros auxilios al animal»: dale un poco de agua si llevas contigo o límpiale las heridas. En caso que que el animal haya fallecido, nunca abandones el cadáver en la vía, ya que además de ser peligroso para otros conductores te podrían sancionar con hasta 200 euros de multa. Finalmente llama a tu seguro para tramitar el siniestro.
¿Quién es el responsable? ¿Lo cubre mi seguro?
En caso de haber atropellado un animal cinegético, los cuales son básicamente todos aquellos relacionados con la caza (liebre, conejo, zorro, jabalí, ciervo, gamo, corzo, rebeco, cabra montesa, muflón y arruí), desde la reforma de la Ley de Tráfico de 2014 es el conductor el responsable, contemplando dos salvedades. La primera de ellas es que el accidente sea consecuencia directa de una actividad de caza mayor que se haya realizado ese mismo día o en las doce horas anteriores al accidente. La segunda, si el animal se ha escapado por un agujero no reparado en el cercado de un terreno o coto de caza. No obstante, demostrar algunas de estas dos posibilidades se torna, cuanto menos, muy complicado, sino imposible.
En el caso de atropello a animales domésticos, como perros o gatos, y según el Artículo 1.905 del Código Civil, es el dueño de ellos es responsable de ese accidente, llegando incluso a incurrir en responsabilidad penal si se originan heridos o fallecidos en dicho accidente. Sin embargo, solo podrás identificar al dueño del animal si éste lleva el microchip obligatorio implantado. Un tercer supuesto son atropellos producidos en cañadas, vías en las que los animales tienen preferencia, y que por tanto será de nuevo el conductor el responsable de esa colisión.
Finalmente cabe preguntarnos, ¿cubre mi seguro accidentes con animales? Las coberturas mínimas proporcionadas por el seguro de responsabilidad civil obligatorio no cubren accidentes cinegéticos, pues como hemos expuesto líneas arriba, es el conductor el responsable. Sin embargo, el modo de proceder es similar a cuando tienes un accidente de tráfico y eres tú el culpable: responderá ante los daños de tus acompañantes y posibles indemnizaciones. Por otro lado, cada vez es más habitual contar con la cobertura de accidentes cinegéticos entre sus opciones, cobertura que sí cubrirá los daños originados en tu vehículo y en tu persona. Igualmente, si el atropello se ha realizado a un animal doméstico, es muy probable que la «asistencia legal» de tu seguro, cobertura que suelen tener la mayoría de las pólizas a terceros ampliadas, tramite la reclamación al dueño de éste.
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