Contenido
- 1) Coloca el asiento a una distancia cómoda de los pedales
- 2) Siéntate lo más bajo posible
- 3) El respaldo del asiento debe ir casi vertical
- 4) El volante debe ir más bien alto, y más bien cerca de ti
- 5) Posiciona tus manos adecuadamente en el volante
- 6) Ajusta la altura del cinturón de seguridad y reposacabezas
Una persona pasa muchas horas al volante, y esas horas, las pasa sentado. Es necesario sentarse de una manera correcta para conducir, no solo para evitar lesiones musculares o de espalda, sino también para estar seguros en caso de accidente y controlar perfectamente el vehículo. En todo momento se deben evitar posturas «de película», por mucho que creas que impresionan. Por ejemplo, no es buena idea llevar los brazos completamente estirados o el respaldo del asiento tan inclinado que nos cueste ver por encima del volante. Estos son los consejos que debes seguir para ir correctamente sentado al volante, además de cómodo y seguro.
1) Coloca el asiento a una distancia cómoda de los pedales
El primer paso para sentarte correctamente al volante es estar a la distancia correcta de los pedales. Lo ideal es que pisando el embrague a fondo nuestra pierna quede ligeramente flexionada. Si está muy estirada corremos el riesgo de sufrir lesiones de cadera en caso de accidente, y si estamos muy cerca de los pedales estaremos incómodos, además de no poder pisarlos con toda nuestra fuerza en caso de necesidad. Todos los coches tienen asientos con regulación longitudinal. Los asientos manuales se regulan mediante un tirador situado en la parte delantera inferior de la banqueta. Los asientos eléctricos se regulan empujando un botón, generalmente situado en la puerta o la parte lateral de la banqueta.
2) Siéntate lo más bajo posible
La posición ideal al volante es la más baja posible. Nos aproximamos al centro de gravedad del vehículo, y acusamos menos las inercias, controlando de forma más efectiva el vehículo. Además, evitaremos que nuestros muslos choquen con el volante, o lo hagan nuestras manos al girar el volante. Esta posición baja de conducción no debe interferir con nuestra visibilidad. Si nuestra estatura es baja y esto nos impide ver correctamente la carretera o la instrumentación, podemos subir la banqueta del asiento en busca de una mejor visibilidad. Hoy día, casi todos los coches tienen asientos regulables en altura, al menos para el conductor.
Nota: el ingeniero de Opel debería acercar el volante más a su cuerpo.
3) El respaldo del asiento debe ir casi vertical
No somos Dom Toretto y no somos los protagonistas de «A Todo Gas». El respaldo del asiento debería estar regulado con una inclinación casi vertical. Podemos jugar con una inclinación de como mucho 20 grados con respecto a esta posición. Nuestra espalda y nuestros hombros siempre deben estar apoyados en el respaldo. Nunca debes conducir agarrado al volante o con la espalda separada del respaldo. Si llevas el asiento muy reclinado, además de no ver correctamente la carretera, corres riesgo de padecer el efecto submarino en caso de accidente: tu cuerpo se «escurrirá» por debajo del cinturón de seguridad y sufrirás graves lesiones con toda seguridad.
4) El volante debe ir más bien alto, y más bien cerca de ti
El volante de tu coche es regulable, tanto en altura como en profundidad. Una palanca situada en la columna de la dirección te permite ajustarlo a tu voluntad. Idealmente, el volante debe permitirte ver la instrumentación y la carretera correctamente, sin que el aro o tus manos choquen con tus muslos y rodillas. Su posición debe ser natural, evitando una altura excesiva que cargue hombros y cuello. Sujetando el volante en la posición de las «dos menos diez», tus codos deben formar un ángulo de unos 90 grados, algo que evitará daños en tus hombros en caso de accidente o repentina frenada.
5) Posiciona tus manos adecuadamente en el volante
Este punto daría para un artículo por sí solo, francamente. Si te tienes que quedar con algo, lo ideal es que nuestras manos descansen en las posiciones de las «dos menos diez» o «tres menos cuarto». Evita agarrar el volante con las dos manos juntas – estoy cansado de ver gente que agarra el volante con las dos manos juntas, en la posición de las «doce en punto» – y evita cruzar los brazos cuando maniobras: es importante tener libertad de movimientos. Suelta el volante sólo cuando tengas que cambiar de marcha o activar algún mando. Ante un imprevisto o una maniobra brusca, necesitas tener las dos manos sobre el volante.
6) No olvides ajustar reposacabezas y cinturón de seguridad
No te vamos a pedir que te pongas el cinturón de seguridad a estas alturas de la película. Es el sistema de seguridad más efectivo de la historia y no llevarlo puesto es completamente ilegal. Pero quizá no sepas que en muchos coches se puede ajustar la altura de su anclaje, en el pilar B del coche. La posición ideal es la que permite que la cinta descanse sobre tu clavícula y no roce el cuello. No olvides tampoco ajustar la altura del reposacabezas de tu asiento. Colócalo a una altura en la que tu cabeza descanse sobre su centro en caso de impacto trasero.