La mejor carrera de la temporada. Desde hace 90 años las 24 Horas de Le Mans han destacado por ser uno de los mayores retos de cualquier piloto, pero también un momento inolvidable para cualquier amante del automovilismo. Durante unos días Le Mans se convierte en el mayor parque temático del automovilismo.
Cada mes de junio Le Mans pasa de ser una pequeña ciudad del norte de Francia a convertirse en el mayor parque temático para los amantes del motor y el automovilismo. Hay carreras, cientos de miles de personas, recinto acotado para acampar y preparar unas tiras de panceta en la barbacoa, olor a gasolina y goma quemada e incluso atracciones y ¡una noria!
Estuvimos en las 24 Horas de Lemans de 2013 para seguir la carrera, hablaros de la victoria de Audi y también de la de Morgan-Nissan y Porsche en sus respectivas categorías. Pero sobre todo para mostraros el ambiente y el espectáculo que se genera en torno a la carrera más espectacular del año, un anacronismo que nos recuerda tiempos mejores en los que las carreras se vivían de una forma bien diferente. Pilotos accesibles a los periodistas, boxes abiertos el día previo para contemplar la frenética actividad de los equipos, tiendas de campaña alrededor del circuito y un ambiente festivo que difícilmente podríamos vivir en cualquier otra carrera.
Pero mejor dejamos de hablar y os invitamos a que visitéis está espectacular galería de 24 imágenes sobre las 24 Horas de Le Mans de 2013.
La salida de Le Mans. Uno de los momentos más emocionantes de la carrera se produce en la salida. Más de 300.000 personas se agolpan en los alrededores del circuito y las tribunas están llenas a rebosar. Los nervios son inevitables y el murmullo y los vítores del público animan a los pilotos para arrancar con buen pie en la carrera más bonita del año.
El Safety Car protagonista de Le Mans en 2013. En más de diez ocasiones el safety car tuvo que hacer aparición en la pista de Le Mans por accidentes que dejaron coches en pista y escapatorias peligrosas o que dañaron los guardarraíles. Esta imagen fue tomada en las primeras vueltas, justo después del accidente de Allan Simonsen. En este momento desconocíamos que el Danés se debatía entre la vida y la muerte.
LMP1: Audi R18 e-tron quattro. Repitieron victoria en las 24 Horas de Le Mans y ya suman nueve en la última década, lo que convierte a Audi en el fabricante más laureado en el circuito de La Sarthe de la era moderna, únicamente superado por Porsche. Entre las curiosidades de este LMP1 cabe mencionar que su motor híbrido diésel consiguió que fuera el coche más rápido sobre la pista, pero también el más silencioso de esta edición de las 24 Horas de Le Mans.
Toyota plantó cara a los Audi. Aunque Audi lideró la carrera de principio a fin, los Toyota vendieron cara su piel en Le Mans. Durante toda la carrera estuvieron presionando a los de Ingolstadt y tras los problemas mecánicos que sufrieron los Audi al filo de la hora número 7, nos hicieron soñar con una carrera en la que no supiéramos quien iba a ganar hasta la última vuelta. El arranque de los Toyota fue fulgurante y trataron de adelantar a los Audi entre los vítores y la emoción del público agolpado en las tribunas.
Los campeones de LMP2. La victoria de los prototipos de Morgan-Nissan del equipo Oak Racing fue incontestable en la categoría LMP2. Aunque en el nombre del equipo rece la marca Morgan lo cierto es que ambos fueron desarrollados por OnRoak Automotive y equipados con un motor de ocho cilindros de origen Nissan.
Dos aniversarios en juego. Centenario de Aston Martin y 50 aniversario del Porsche 911. Fueron los de Stuttgart los que se llevaron el gato al agua y cosecharon sendas victorias en las dos categorías de GTE.
Aston Martin Vantage GTE. La espectacularidad y belleza de los Aston Martin con la decoración de Gulf en Le mans no fue suficiente para que estos pudieran celebrar, merecidamente, el centenario de la marca en ninguna de las categorías que participaron.
Dunlop Art Car. Desde que en 1975 BMW sorprendiese a propios y extraños con un BMW 3.0 CSL con una decoración extravagante y atípica para los deportivos de carreras de la época, los coches artísticos se han convertido en otra de las tradiciones de Le Mans. Dunlop apostó por un diseño realizado por el ganador del concurso que lanzaron este año. El equipo OAK Racing también contó con una decoración peculiar para uno de sus LMP2 basada en placas y chapas de colores soldadas a la carrocería. Obviamente, el modelo que corrió en Le Mans fue revestido con un vinilado mucho más ligero.
Grúas y tractores al rescate de un coche accidentado. Se oye un desgarrador sonido de neumáticos sobre el asfalto a mi espalda y cuando me doy la vuelta para contemplar lo sucedido esperando el golpe de chapa final, me encuentro con este SRT Viper GTS-R atascado en la puzolana de las últimas enlazadas antes de la recta de meta. Su piloto quedó atascado pero no se bajó del coche a la espera de una grúa que lo devolvió al asfalto en pocos minutos.
Solo dos mecánicos a la vez. A diferencia de la Fórmula 1, en la que un equipo de mecánicos rodea el monoplaza, en Le Mans únicamente pueden trabajar a la vez dos mecánicos sobre el coche. La maniobra también exige estrategia y todas las tareas se realizan en orden, y no de forma simultánea, pero siguiendo una perfecta sincronización. Los neumáticos se cambian uno a uno, se limpia la luna delantera, se realiza el cambio de pilotos y se realiza el repostaje.
Miles y miles de neumáticos. Michelin puso al servicio de los equipos de LMP1 (en exclusividad), LMP2 y prácticamente todos los GTE PRO y GTE AM más de 7.000 neumáticos para las 24 Horas de Le Mans de 2013. Entre los neumáticos de que dispusieron los LMP1 se desarrolló un peculiar “slick” sin dibujo concebido para asfalto húmedo y suaves lloviznas.
Los códigos de luces para la carrera nocturna. Al caer la noche los pocos focos repartidos a lo largo del circuito iluminan puntos estratégicos, por ejemplo las curvas y la zona de la tribuna de meta. Pero en cualquier caso y ante la falta de iluminación y paneles que indiquen la posición real en carrera de un coche, los códigos de luces y un indicador luminoso junto al dorsal nos indican si el coche está en puestos de podio de su categoría. Este Audi R18 e-tron quattro #2 iba encabezando su categoría.
Paseo por boxes. A 24 horas de la carrera la actividad es frenética en boxes. Los equipos ultiman la preparación de los coches y los aficionados pueden pasear por boxes o incluso la recta y las curvas Dunlop para contemplar el ambiente de Le Mans a pie de pista. Esto es algo que solo se puede vivir en Le Mans.
El desfile por las calles de Le Mans. Desde el lunes previo a la carrera las calles de Le Mans ya están en plena actividad con el inicio de las verificaciones técnicas que se realizan en el corazón de la ciudad de Le Mans. El viernes previo a la carrera todos los equipos y los pilotos desfilan por las calles de Le Mans en un ambiente de celebración único e incomparable con el de cualquier otra carrera que se dispute actualmente.
El trofeo de las 24 Horas de Le Mans. El deseado trofeo que acredita a los campeones de la carrera de resistencia más legendaria del mundo, se pasea a 24 horas de la carrera por el desfile de pilotos en las calles de Le Mans. Más tarde se deja descansar sobre el podio hasta que la carrera termina y a la espera de que el campeón levante tan codiciado premio.
Le Mans sí es país para viejos. La veteranía es un grado en Le Mans y varios equipos participantes este año contaban con una media de edad superior a la cincuentena. La veteranía de este trío de Oak Racing contrastaba con la juventud de otros participantes como Cooper Macneil, debutante en Le Mans este año.
Le Mans Classic. Para los más madrugadores, la mañana del sábado comienza con la carrera de clásicos en la que nos podemos deleitar con el paso de las viejas leyendas del automovilismo.
Ferrari Challenge Trofeo Pirelli. Ver más de cuarenta Ferrari 458 Challenge compitiendo rueda a rueda en Le Mans también tiene su morbo. Esta carrera tuvo lugar cuando apenas faltaban un par de horas para el arranque de las 24 Horas de Le Mans de 2013 y nos dejó imágenes tan bellas como la que ilustra estas líneas.
Jean Todt se pasea por la parrilla de salida minutos antes de la carrera. El presidente de la Federación Internacional de Automovilismo no quiso perderse esta fiesta del Automobile Club de l’Ouest. Allá por los años 90 ya fue campeón en dos ocasiones como Director de la sección deportiva de Peugeot.
Pescarolo es Le Mans y Le Mans es Pescarolo. Henri Pescarolo tampoco quiso perderse la fiesta de Le Mans, que bien podría ser tan importante para él como su propio cumpleaños. Ostenta el récord de haber participado en las 24 Horas de Le Mans en 33 ocasiones con 4 victorias. Este año fue el encargado de dar la vuelta de honor con el Audi R8 que abrió la carrera y tuvo ocasión de recibir el cariño y la ovación del público asistente en la grada.
La debacle de Aston Martin. Una carrera para olvidar. Aston Martin no pudo honrar la memoria de Allan Simonsen, fallecido en las primeras vueltas en un accidente con su Vantage GTE #95, ni tampoco celebrar su centenario sin que fuera empañado por ese trágico choque, el abandono de algunos de sus coches y la incontestable superioridad de Porsche.
El parking de las 24 Horas de Le Mans. En Le Mans el espectáculo no solo está en la pista. En los alrededores se extienden hectáreas de zonas acotadas para los campistas en las que las barbacoas y las tiendas de campaña comparten terreno con los mejores superdeportivos. Es fácil encontrarte un Ferrari aparcado junto a una tienda de campaña, forma parte del espíritu de Le Mans. En los parking aledaños a Le Mans nos podemos encontrar todo tipo de clásicos y deportivos.
Patrick Dempsey, ¿el nuevo Steve McQueen? El público adora los ídolos y hay quien ha visto en el doctor de Anatomía de Grey un nuevo líder de masas. La expectación que rodeó a Dempsey en la carrera era realmente espectacular para un piloto que aún no ha cosechado títulos importantes y que no oculta que comenzó en la competición hace apenas unos años, apuntándose a un curso de pilotos que le regaló su mujer. Esta foto de la tienda oficial del Museo de Le Mans es una buena muestra del merchandising oficial del piloto.
Le Mans a vista de pájaro. Uno de los momentos más emocionantes para un servidor en estas 24 Horas de Le Mans lo vivíamos sobrevolando la pista en plena carrera en helicóptero. Sinceramente creo que esta es la única forma de hacerse a la idea de las dimensiones del circuito semi-permanente que se extiende a lo largo de los bosques que cubren la región de La Sarthe.
La foto nº25. Pegasus. Este fue el helicóptero con el que sobrevolamos el circuito de Le Mans. ¿Te suena de algo? Efectivamente se trata de un antiguo helicóptero de la DGT. Antes multaba a infractores y ahora pasea a los VIP por Le Mans. Sus actuales propietarios debían estar encantados con la decoración amarilla y azul puesto que ni eliminaron el emblema de la Dirección General de Tráfico.
