2023 está a la vuelta de la esquina, y a causa de ello, queda menos de un mes para que entre en vigor la obligatoriedad de instaurar zonas de bajas emisiones (ZBE) en todo municipio español que tenga más de 50.000 habitantes. Hay 150 municipios que tendrán que tener una ZBE en vigor el próximo 1 de enero, y todas ellas serán diferentes en extensión, horarios, permisividad o régimen sancionador. El denominador común es que excluirán de la circulación a los coches sin etiqueta, pero afortunadamente, 2023 no dejará aun sin oxígeno a tu viejo coche.
Y el motivo no es otro que la ineficacia y lentitud de ciertas administraciones públicas, entre otros motivos de otra índole. La realidad es que el 1 de enero de 2023, solo estarán en funcionamiento 20 de las 150 zonas de bajas emisiones que deberían entrar en funcionamiento en nuestro país – según obliga la Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica. En un informe elaborado por El País – que recogimos en este artículo – tras entrevistar a los 150 ayuntamientos españoles obligados a tener ZBE, queda claro que «nos ha pillado el toro».
En estos momentos, muchos ayuntamientos – los responsables del diseño e implantación de las ZBE – están licitando informes previos al diseño de las zonas de bajas emisiones, o están en proceso de implantación. La vigilancia de las ZBE se llevará a cabo mediante un sistema de cámaras de control, y como es lógico, implica una potente inversión – recuperada en sanciones, como ya ha demostrado el Ayuntamiento de Madrid. En cualquier caso, en general, España va tarde, y esto significa que tu coche sin etiqueta podrá seguir circulando sin restricciones en no pocos sitios.
Este balón de oxígeno ayudará a las personas que no se pueden permitir medios de movilidad modernos, y dará un tiempo extra a muchos conductores para poder cambiar de vehículo o replantearse la forma en que se mueven. No obstante, entramos en tiempo de descuento: todo apunta a que la mayor parte de ZBE entrarán en funcionamiento a lo largo del año 2023, aunque hay varios ayuntamientos – por ejemplo el de Guadalara o El Prat de Llobregat – que han confirmado que no tendrán su zonas de bajas emisiones activa hasta el comienzo del año 2024.
Hay otro factor del que no se están hablando demasiado de cara a las futuras restricciones. Pero es un factor que, personalmente, creo que hay que tener muy en cuenta a la hora de informar de la entrada en funcionamiento generalizada de las ZBE: en mayo hay elecciones municipales en toda España. Y como es obvio, el arranque de una ZBE es un factor con gran potencial para causar descontento en el electorado: para muchos ayuntamientos, es un incentivo realmente poderoso para «aplazar» su entrada en vigor, alegando quizá motivos técnicos o normativos.
¿Qué ZBE están ya activas?
En estos momentos, existen varias ZBE en funcionamiento en España. Las más conocidas son las de Madrid y Barcelona, pioneras en nuestro país. También cuentan con ZBE activas los municipios de Cornellà de Llobregat, L’Hospitalet de Llobregat, Pamplona, Pontevedra, Rivas-Vaciamadrid y Sant Cugat del Vallès.
¿Qué ZBE entrarán en funcionamiento al empezar 2023?
Al inicio de 2023, los municipios españoles que tendrán implantada su ZBE, serán Alcobendas, Algeciras, Burgos, Córdoba, Fuenlabrada, Ciudad Real, Coslada, Sevilla, Talavera de la Reina, Melilla, Parla y San Cristóbal de La Laguna.
¿Cuáles son los coches sin etiqueta ambiental?
También conocidos como coches de etiqueta A o clasificación ambiental A, son los coches de gasolina anteriores a la normativa Euro 3, y los coches diésel anteriores a la normativa Euro 4. Aproximadamente coincide con los coches de gasolina anteriores al año 2000 y los diésel anteriores al año 2006, pero hay múltiples excepciones a esta norma. Para salir de dudas, lo mejor es consultar la web de la DGT a través de este enlace e introducir su matrícula. De esta forma rápida y gratuita podremos conocer su clasificación ambiental.