Cada día que pasa me pregunto con más frecuencia sobre dónde están los límites de los coches y hasta dónde es necesario llegar para, supuestamente, hacerlos especiales. Hoy me la he formulado por culpa del Audi RS 3 Performance Edition, una edición limitada a 300 unidades que tiene como principal novedad que su punta es de 300 km/h. Para mí una innecesaria excusa para hacer especial a un coche que ya de por sí es especial.
Por favor, no quiero que me malinterpretéis: el Audi RS 3 me parece un coche muy bueno en su campo y sí, muy especial por el motor que tiene en sus entrañas en estos tiempos oscuros que corren. Pero, ¿no era esto ya suficiente mérito como para no tener que rebuscar en los límites de un compacto deportivo? Parece ser que no, y es por ello que existe el RS 3 Performance Edition con una pizca de más en casi todo.
Audi A3
Sin límites para el Audi RS 3 Performance Edition, o lo que es lo mismo, el RS3 que alcanza los 300 km/h
Soy partidario de que, usada con cabeza, la potencia es sinónimo de seguridad. Pero no creo que poder alcanzar los 300 km/h sea síntoma de nada. Y pese a que la principal credencial del RS 3 Performance Edition sea su velocidad punta, cuenta con otras novedades que, a mí parecer, lo hacen más interesante que rebasar unos límites que creo que estaban más que correctos.
Rápidamente nos percatamos de la presencia de unas llantas de nueva cuña de aluminio fundido en 19 pulgadas, que son más ligeras y que se encuentran envueltas por unos neumáticos Pirelli P Zero Trofeo R. Los frenos son carbocerámicos, y las pinzan están pintadas en azul para la ocasión, y se incluye de serie el tren de rodaje deportivo RS, que permite regular la amortiguación.
La banda sonora del cinco cilindros mejora por cortesía de un escape deportivo RS que modifica el silenciador central y se diferencia, además de por la sonoridad, por unas salidas de escape ovaladas rematadas en negro brillante. En lo que a mecánica pura y dura se refiere, el Audi RS 3 Performance Edition sigue haciendo gala del que es, sin lugar a dudas, el punto álgido de este coche: un motor de cinco cilindros y 2.5 litros sobrealimentado por turbo.
¿La diferencia? Que la potencia aumenta ligeramente hasta los 407 CV, mientras que el par se mantiene en los mismos 500 Nm. Sea como fuere el 0 a 100 ocurre en 3,8 segundos como en el Audi RS 3 estándar, pero ahora es posible alcanzar los 300 km/h frente a los 290 km/h que puede alcanzar el compacto alemán si equipamos el paquete RS dynamic plus -sin este la velocidad está limitada a 250 km/h-.
En cuanto a estética nos encontramos con un color Gris Daytona específico de esta edición especial, así como una infografía nueva para el sistema de infoentretenimiento en el que se refleja un fondo en fibra de carbono para mostrar el orden de encendido de los cinco cilindros. A ello hay que sumarle unos asientos tipo backet, costuras en azul junto a la marca central del volante y cinturones a juego, así como la proyección de una bandera de carreras en el lado del copiloto y del número 300 en el lado del conductor cuando abrimos el coche y el símbolo «RS3» cuando lo cerramos.
Eso sí, Audi aún no ha desvelado el precio que tendrá el Audi RS 3 Performance Edition en el mercado español ni cuántas de las 300 unidades estarán destinadas a este. Sea como fuere, estamos hablando de un considerable sobreprecio respecto al Audi RS 3 convencional, un coche que, de por sí, ya es especial.