Puede que le esté cayendo la del pulpo a la gente de Mitsubishi por el nuevo ASX, un coche que no deja de ser un Renault Captur con los logos cambiados. Pero, ¿es realmente esto algo tan grave? Lo cierto es que no, puesto que es una estrategia para reducir costes y emisiones de manera rápida con un coche contrastado, además de que no es algo que solo haya hecho Mitsubishi como dejan patente estos 5 ejemplos de rebranding.
Y es que al fin de cuentas esta alternativa se ha utilizado sin tapujos a lo largo de la historia del automóvil. Vale, sí, Mitsubishi podría haber disimulado un poco el parentesco entre Captur y ASX, pero no es algo que implique una lapidación mediática, y menos cuando en la actualidad hay muchas marcas que hacen lo mismo con mayor o menor cercanía entre ambos modelos.
Toyota GR86 y Subaru BRZ, los gemelos más apasionantes del momento
Mitsubishi ASX
Si pensamos en una pareja de coches gemelos actual seguramente se nos vengan a la mente los Toyota GR86 y Subaru BRZ, que repiten fórmula en su segunda generación. Y es que el dúo nipón empezó sus andaduras cuando el retoño de Toyota se apellidaba GT86, y compartía todo con el BRZ salvo los logos y algún detalle mínimo.
Aunque bien es cierto que la segunda entrega del BRZ ya no se comercializa en Europa, el GR86 sigue al pie del cañón con el mismo esquema mecánico que su compatriota y prácticamente misma estética. Esto se traduce en un deportivo 2+2 que hace gala de un cuatro cilindros atmosférico bóxer de 234 CV que se gestionan por medio de una caja manual de seis relaciones.
Toyota Corolla y Suzuki Swace, dos familiares útiles, híbridos y prácticamente iguales
Suzuki ha sido otra marca que ha jugado dicha baza en busca de reducir sus emisiones globales. Y es que pese a que la firma cuenta en su haber con una gama de vehículos micro-híbridos, Toyota se puede considerar como una experta en lo que a hibridación se refiere, y es por ello que nació el Suzuki Swace, que no deja de ser un Toyota Corolla Touring Sports con los logos cambiados.
Cambian algunos detalles estéticos, tales como defensa y parte del capó para integrar el logotipo de Suzuki. Pero en lo que a mecánica se refiere tenemos el mismo coche, estando el Swace también animado por un motor híbrido de 122 CV y 142 Nm de par.
Toyota RAV4 y Suzuki Across, una colaboración de nuevo entre paisanos
La coalición entre Toyota y Suzuki no solo se ciñó a la concepción del Swace, sino también del Across. Estamos hablando de un suv híbrido enchufable que toma como punto de partida al Toyota RAV4 y, al igual que su hermano familiar, ofrece ciertas diferencias estéticas respecto al retoño de Toyota.
En este caso también cambia la defensa y algunos detalles, pero nada demasiado trascendente, pudiendo intuir que detrás del Suzuki Across se esconde un RAV4. Y eso lo deja patente su esquema mecánico, el cual está conformado por un motor de cuatro cilindros que, en combinación con uno eléctrico, desarrolla un total de 306 CV, cifra que se combina con una autonomía en modo eléctrico de 75 kilómetros.
Volkswagen Up!, Skoda Citigo y SEAT Mii, el trío de utilitarios que consiguió triunfar
Suele ser muy habitual encontrar este tipo de sinergias entre marcas del mismo grupo, y así lo demostraron los Volkswagen Up!, Skoda Citigo y SEAT Mii, un trío de utilitarios que eran, en esencia, el mismo coche. Ya sucedió otrora con el Volkswagen Lupo y con el SEAT Arosa, y la jugada se volvió a repetir en busca de reducir costes.
Sí, aquí podemos apreciar diferencias estéticas más obvias en busca de hacer a cada coche a imagen y semejanza de la casa a la que se acogía, pero el diseño general era el mismo. Y así también lo era el apartado mecánico, tanto en variantes de combustión como en las exitosas versiones 100% eléctricas de las que gozaron los tres modelos.
Mitsubishi Outlander, Citroën C-Crosser y Peugeot 4007, la aventura de Mitsubishi pero del revés
Corría el año 2007 cuando Citroën y Peugeot pusieron en juego a los C-Crosser y 4007 respectivamente. Se trataba de dos SUV compactos con capacidad para siete ocupantes que se desarrollaron… a partir del Mitsubishi Outlander de por aquel entonces. En una primera instancia los tres modelos se fabricaban en Japón, pero tras revisar las expectativas de ventas de estos, decidieron trasladar su producción para el mercado europeo a Holanda.
En esencia eran los tres el mismo coche, solo que tanto Citroën como Peugeot adaptaron a sus respectivos retoños a sus cánones de diseño, dejando patente una clara diferencia entre los tres. Donde esta no lo es es en el habitáculo, apreciándose el claro ADN que compartían los tres SUV.