Mercedes ha dado a conocer el lavado de cara de la actual generación del Clase E, en el cual ha apostado por una estética sutilmente más deportiva y por seguir recorriendo esa senda de la electrificación, todo ello sin grandes cambios, y es que las más de 1,4 millones de unidades vendidas desde el 2016 no son motivo para cambiar algo que ya funciona bastante bien.
Leves retoques estéticos casi inapreciables
Esta actualización ha afectado a toda la gama del Clase E al completo, desde la versión sedán hasta al familiar (Estate), pasando por los coupé, cabrio y su familiar de aspecto campero denominado «All-Terrain». En el frontal, apostando por aspecto más dinámico y deportivo, la estrella en la parrilla se incluye de serie en las versiones básicas, y en las de corte más deportivo, denominadas Avantgarde y AMG-Line, así como en la All-Terrain, se ha rediseñado el capó con unos nervios más marcados.
Mercedes-Benz Mercedes Clase E
En la zaga destacan las nuevas ópticas en dos piezas, así como un paragolpes de nueva factura. El conjunto exterior de completa con varias incorporaciones a la paleta de colores y nuevos modelos de llantas opcionales optimizadas aerodinámicamente para conseguir un menor consumo.
En el interior también se ofrecen nuevas combinaciones cromáticas en función del acabado, así como varias molduras de madera de fresno o aluminio cepillado. Sin embargo, el mayor cambio nos lo encontramos en su volante de nuevo diseño, de cuero con adornos plateados y con dos superficies táctiles en negro brillante, además de contar con nuevos sensores de detección de manos (Hands-Off) con los que ya no es necesario ejercer una cierta fuerza sobre el mismo para que las detecte y actúen los diferente dispositivos de conducción «semi-autónoma».
Incorpora el último sistema MBUX y «modo siesta»
A nivel tecnológico añade la última versión del sistema MBUX de Mercedes, así como una actualización general de las muchas ayudas y asistencias a la conducción, como por ejemplo el control de crucero con adaptación automática de velocidad, el detector de ángulo muerto que también avisa al bajar del coche, el asistente de frenado, que además de frenar automáticamente para impedir una colisión también es capaz de hacer que el vehículo gire o el asistente de estacionamiento que detecta las marcas viales del aparcamiento.
También destacan sistemas como el URBAN GUARD y su versión Plus, una alarma antirrobo de última generación, que además de añadir los típicos avisos acústicos y lumínicos, protección antirremolque o alarma volumétrica, también es capaz de evaluar la gravedad de una colisión con el vehículo aparcado y avisarnos en nuestro smartphone mediante la aplicación Mercedes me, así como mantener localizado el vehículo en todo momento.
Por último, y cuanto menos curioso, el sistema ENERGIZING es capaz de adaptar la iluminación interior, música y masaje del asiento de cara proporcionar el ambiente óptimo al conductor para echar una cabezada o para retrasar la aparición de fatiga en largos viajes sentado en los que no es posible cambiar de posición.
Nuevo sistema de hibridación ligera de 48 V y 15 kW
A nivel mecánico nos encontramos con un nuevo sistema de hibridación suave de 48 V en los motores gasolina y diésel. Este sistema es capaz de aportar un extra de potencia de 15 kW (unos 20 cv) y hasta 200 Nm de par, además de mejorar el modo vela. En este sentido, el compresor de aire acondicionado para a ser eléctrico (en lugar de estar accionado por el motor mediante la correa de accesorios), lo que significa que durante esos periodos de «planeo» o cuando actúe el sistema Start&Stop seguirá funcionando el climatizador (además de ser más eficiente).
En los propulsores diésel se incluyen otra serie de novedades, como un nuevo cigüeñal que permite aumentar la cilindrada hasta los 1.993 c.c. (50 c.c. más) o la introducción de geometría variable en los dos turbos refrigerados por agua. Por su parte, los motores de gasolina cuentan con un nuevo turbo twin scroll rediseñado y la incorporación de un compresor eléctrico.
Así, la nueva gama de motores quedaría compuesta por los gasolina E200 (197 cv) y E300 (258 cv) de cuatro cilindros y el E450 (367 cv) de seis cilindros, junto a los diésel E200d (163 cv) y E220d (194cv) de cuatro cilindros y E400d (330cv) de seis. Las versiones cabrio y coupé prescinden de propulsor turbodiésel básico, y también podemos encontrarnos los híbridos enchufables E300e (320 cv) y E300de (306cv) disponibles en el sedán y familiar con un motor eléctrico de 90 kW.