Hay algo fascinante en los todoterrenos con carrocería descapotable. No sabemos qué es, pero suponemos que es la combinación de estar disfrutando del campo a cielo abierto, mientras superamos obstáculos que pondrían en ridículo a cualquier turismo convencional. Mercedes fabricó durante muchos años versiones descapotables del Clase G, con una carrocería corta de tres puertas – y una batalla corta a ella acorde. La noticia del día es que pronto podríamos volver a ver una versión Cabriolet del fantástico Mercedes Clase G.
Como todoterreno puro, ningún coche es capaz de superar al Mercedes Clase G. Solo un Jeep Wrangler Rubicon corto puede igualarlo en algunos aspectos, sin llegar al refinamiento, lujo y calidad interior del alemán. El último Mercedes Clase G Cabriolet se vendió en el lejano año 2013, cuando Mercedes vendió una edición limitada a 200 unidades, que se agotaron en cuestión de horas. Desde entonces, solo han fabricado una versión descapotable: el Mercedes-Maybach G 650 Landaulet, de carrocería extralarga y precio cercano al millón de euros.
Mercedes-Benz Mercedes Clase G
Un coche que en mi opinión, nunca representó el verdadero espíritu del Mercedes Clase G Cabriolet, y que era poco más que un juguete de gran tamaño para adultos extremadamente adinerados. La noticia es que GTSpirit ha descubierto que Mercedes está contratando ingenieros para el «desarrollo de un producto de techo de lona retráctil». No estaríamos hablando de un cabrio basado en el Mercedes Clase C o en un Mercedes SL, ya que esos coches no se fabrican en Graz, en las instalaciones productivas que Magna-Steyr opera en Austria.
Aunque en esas instalaciones se han producido cabrios de bajo volumen, son conocidas por ser el lugar de fabricación exclusiva del Mercedes Clase G desde hace décadas. Lo cierto es que el retorno del Mercedes Clase G tendría mucho sentido. La actual gama del Clase G disfruta de buenas ventas y un tremendo margen comercial, y tiene sentido que Mercedes la quiera expandir. La versión Cabriolet no solo mejoraría las cotas de la versión larga, si no que añadiría una dimensión lúdica – y aún más margen comercial – a la ecuación del todoterreno alemán.
A esta versión Cabriolet pronto se sumaría una versión 4×4 al cuadrado, posiblemente basada en el Mercedes G 500 o el Mercedes-AMG G 63. Esta versión será de producción limitada, superará los 200.000 euros y mantendrá los ejes tipo pórtico de su antecesor. En resumen, nos queda Mercedes Clase G para rato y pronto conoceremos dos versiones apasionantes.
Fotos del Mercedes Clase G 2020